sus años turbios. Entre ellos dinero fácil, vender su cuerpo y la más sorprendente, estuvo de amante de un narcotraficante. Él acabó en la cárcel. Por eso ha vuelto, está
este asunto como toda una guerrera -habló
él ha demostrado que es
ajo y tu ayuda fue mejor
ñana y al ser viernes me tomé libre de la oficina. La persona detrás de la pu
ero-. ¿Quién será? -susurré par
se día, pero no por hacerla sufrir. En cambi
r favor! -súplica con la
. -Se levanta Peter y se ace
sos ojos de ternero degollado tiene suficiente y no la termines de espantar.
nada contra la rabia. -Le da dos leves p
ndeja de sandwich de mezcla y se la ofrezco. Ella
s raro en nosotras-. Necesito acla
-señalo la silla y se
bajar la mirada recuerdo los papeles y los re
y la contestación es que eres todas -se mantuvo callada y tomó aire-. Depende de mi estado de ánimo, podrías ser mi confidente, c
de frente a Camillia. Espera por mí, sus pi
. No puedo negar que dolió, pero siempre serás mi niña y
arnos enseguida vuelvo a mi piel dura. La sonrisa radiante de Camillia me contagia y sonrío. En eso suena su celular,
es genial! -juega con un mechón de c
ada suspira y vue
se suspiro, su
a la bandeja de sandwich de mezcla -. Me v
s. Mi celular sonó, lo agarro del escritorio y antes
us dientes blancos perfectos-. Quiero saber todo
s seguro nada. -Se gira
olección de la tienda y en conjunto con una gran diseñadora. Es Eva Zaragoza, está abriéndose paso en el mercado de la moda
tuario. ¡Por favor! -pausa-. Necesito que logres que C
e fondo su equipo de trabajo y
strés. -Escucho a una mujer preguntánd
fuera de la línea-. Sabes que es imposible
¿por qué te
imos juntas. Le gusta estar presente para qu
s, solo logra que la niñ
que bajes esa intensidad. -Escucho que se
iga tu con
adas. El aire cálido me abraza, voy con pasos largos y con mi mente en aquel beso. No he podido dejar de imaginar los miles de escenarios y hasta que no tenga a ese se
! -se quita el sombrero y s
eo por mi finca -recorro la f
Antes de irme y dejarla sola le agradezco por darle trabajo a mi sobrino. -Su sincero
er, espero que no lament
sienta bien la finca -
as todo con tus com
caballerizas? -hice la pr
y no soy buena en ese estado. Me aprieto el tabi
y, lo pidió por asuntos p
de voz es autoritario-. Olvídalo, Demetrio, la próxima vez..
o a los peones, siempre Demetrio ha estado
e deba saber? -cu
y cierro mis
n su trabajo
mi mente en blanco para esta no
.
ña está preciosa con un traje largo de color blanco en forma de corsés. La cola del traje tiene una apera Kendra, toda de color
ebajo de las rodillas y termina con una cola de campana que tie
mi falda ceñida-. Solimar quería tu pelo en moño, pero aun ll
a obsesión ambas de l
soportar a tu madre detrás de tus orejas recordándote que no debiste nacer. -
cenario es
el Sheraton Old San Juan hotel. Al pisar en el centro de convenciones somos atrapadas por una tromba de fotos. Solim
y luego voy a verificar que todo esté s
s ojos buscan posibles a
reocuparte más y disfruta -sé que cada palab
sarcástica Solimar y sonríe a unas s
alla de pasarela muestra imágenes de la tienda, modelos con la ropa y anuncios. Está todo en
? -Camillia se despeina su pelo ru
ra el público-. Al menos tienes porte, eso me debes agradecer a mí... -se seña
trearlo y agradecerle por haber creado el dolor de cabeza de Solim
mandíbula tensa y veo el miedo en sus ojos al mencionar a ese peón. Se acerca Eva elegante con un traje negro
ello castaño lo tiene recogido en una dona alta-. Kendra, perdona, pero me la
eando y ella vuelve a la real
te veo a Peter, me a
veinte patadas a todas! -Peter pon
azo y nos apartamos-. Por t
toy hermoso? -pregunta y da u
u camisa blanca con círculos az
ás, aunque hoy
mos viendo el desfile y hay modelos mixtos. La ropa es de mujer y ho
emocionada y al levantar mis ojos ch
y encienden. En la cara del insolente se percibe sorpresa en su rostro, pero disimula enseguida y continúa mirando h
Pet y apretó mi brazo emocionado. Sin embargo, no puedo despegar la vista de su
de músculos quién lo
con
s el semental q
Demetrio?! -se so
eter abre sus
tal? -indicó con su dedo la
or dónde van tus p
redondo! -movió sus manos recreando al modelo-. Es perfecto, desde su melena negra cayendo en sus ojos haciendo que s
por la noticia y él no coopera-. ¡Demonios, de p
el final. Necesito averiguar qué sucede
, ve por ese bombón -Pet me e
o menciones nada -le h
dudes de mí, l
razándose. Estoy buscando, pero no lo veo y me empiezo a desesperar. Era él, no vi visi
voz de creído me toma por
si nos tocamos. Fausto tiene una d
respeto, irrespetuos
me enerva y por
modelaje no lo eres, Potra. -Recorre con su
né endiablada por su actitud-. ¿Es un ju
viejas con ínfulas que las persigu
ada es mi her
a mirada hacia mi
isgustado por mi reclamo-. Soy modelo, hago fotos y he trabajado para ella en otras ocasiones
pero tiene ese mod
lo -murmuré y a
, escandalosa-. Me lo cuentan y no do
supones? -Solimar se confunde y nos
empleado -lo señala-
quier persona. En estos momentos prefiero pasar el tiempo divirtiéndome, no estoy en horas laborale
nsé que mezclarías el t
pasado -contesté
lo obtendrás, no te cu
no confabulé para tenerlo en mis bragas po
-Sol se ha quedado pasmada-. Las vuelta
redonda y plana -refuté y Sol me dio una
a -se inclina ante mí
visar que tienes mod
modelos con tres cabezas, ca
con tu amargura
asa un mesero y Sol
habló por encima del vaso de cristal-. Está af
nados esta mañana. Sostengo por los hombros a
l interrogatorio-. No podías f
stallaría tu niña mimada --alzó la voz y sonrió
be la brisa y me estremezco. Camino en su búsqueda, pero no la encuentro y dec
esta con amigos
am
textear la
er quién es t
después,
ldiciones. Mi corazón se acelera, faltaría que me ataquen y correr con estos tacones sería imposible. Estoy pensando en las opciones de vida. Puedo quitarme los tacones y correr. Llamar a los p
e! -grito desesperada, mis dedos tiembla
na furgoneta negra, se marchan chillando goma y me tranquilizo. Camino lo más rápido que me permite el vestido y los tacones. El hombr
ambulancia! -me quita el
ol, sus ojos azules y sus heridas. Ojo morado
otra -susurra y escup
e ve un moretón enorme en su costado. Maldice p
-Muevo la cabeza de lado a lado
á su tic en su ojo izquierdo-. No volverán, me necesitan vivo
en qué lío anda? Me pudieron matar por querer
soy: desde drogadicto, estafador y acosador. En fin, un sinnúmero de cosas depravadas -tomó aire-. Necesito el dinero
bro mi mano y él po
que me aparte y lo despida. Pero la obstinada Kendra, la que
rvioso-. Solo me tomo mi tiempo. -Me entreg
os recogerá,
on, mi tronca
tomas algo y te l
levantarse, se remilga todo y lo ayudo. Al incorporarse, se aparta y le d
endra! ¿Se e
mpleado. Estoy bien, g
a sacar su celular y veo el
ajo control,
bre la puerta
te llevaremos
sostiene el costado y so
tro, le sirvo un trago de Don Q co
risa? -da un sorbo grand
lente todo golpea
ex y los agarra. Hecha un poco del trago
rotección. -Se limpia la boca y me q
besar esas heridas. Probar esos labios rosados y lastimados. Ansío perderme en su
e de privacidad de una persona? -le hic
emido por su parte y me siento a horcajadas en su regazo. Su dolor se apagó con deseo y con una pasión llena de frenesí total. Agarro su pelo fuerte y con mi otra mano sostengo su miembro duro. Se siente muy bien, cuánto daría por tenerlo dentro y me pierdo con sus manos
y segura-. Veo que estás en perfectas condiciones. -Suelto s
o, indicarle dónd
o suelta en la barra. Al girarse hacia mí,
son amortiguadas-. Estoy en buenas c
s miradas están unidas, se muerde e
iña el ojo todo insolente y se mar
por él. No puedo irme sin estar
ta, ¿no
a camioneta "Ford"
No entiendo este sentimiento, lo más seguro es porque lo atacaron y no quiero verlo mo
marchamos, mi mente
mente en las nubes. Debe ser la emoción de la noche, ca
.
a y con un vaso de Don Q con Coca Cola. En toda la noche no consumí alcohol, sin embargo, heme aquí rodeada de libros, oscuridad e insomnio. El ru
uentro -la insoportable v
invitación se acomoda en la butaca al lado mío. En
erdas. -Muevo el vaso
a dar un paseo por la finca y veo tu luz
mas de toda la vida y expulsa el humo. Al
buscarte por la casa y te encue
bajar el mal sabor de su aparición-. La conciencia te está carcomiendo, pero no me importa
as, somos iguales
volteo en la butaca y derram
como todos los obstáculos que se interponen en mi vida, los salto. Eso pretendía hacer, pero tu padre no me lo permitió y me llené de rencor -silencio y respira hondo-. No recuerdo nada bonito d
zón bombardea a las millas. Es increíble sus palabras, s
rte-. En fin, la conclusión es que no somos nada p
i con el dinero, llena de mucha mierda y nunca imaginé que me enamoraría. Oh, sí, Kendra, sentí el amor y no se co
a le pregunto-. Espera, no respondas. Es obvio, con el nar
uestren un sentimiento, me mira c
ído en lo más bajo, porque ese fue el precio para el amor. Nunca esperé que entiendas mis pasos y menos los explicaré. Quiero darte este consejo, aunque no sea bien
palabras y me siento
¿en qué nos parecemo
nos bloquea y no vi
El ruido llenando este silencio. La rabia latente, los pedazos de vi
.
rugada y no puedo apaciguarme. Agarro mi celular, marco a Leonardo Contreras. M
música y una mujer a su lado-. Espera
iras, soy su hija y bus
o, lástima tenía planes pa
nga larga de color blanca y me quito el camisón. Vuel
e la mujer por una emergencia familiar-. A
quiero conducir l
gras, me veo en el espejo con e
aña y tengamos más privacidad. Llego enseguida, no estoy le
Sonrío traviesa y m
al encargado. Es un señor entrado en edad, asiento con la cabeza en agradecimiento y continúo el camino. Estoy delante de la casa rústica, su fachada es pura de hombre y acogedora. Al bajarme siento frío, mis pezones se asoman y
exy y con frío -habla Leroi con s
en el pecho. Su cabello revuelto y ojos oscuros como la noche. Me besa las dos
ta y no tendré que golpearte. -Alzó sus
s la oportunidad
o Cristóbal Col
-me lanza una guiñada y ni
u elegancia y porte. Es un maduro, pero no tiene que envidiar nada a un joven de quince. Él con esos ojos chocolate, cara cuadrada y labio
ada -me atrae hacia su pe
ca. Con una mano agarro fuerte su camisa y la otra la sumerjo por su cabello c
me suelta Leonardo-. Les propongo h
Su mano en mi cintur
tado hermano -une sus manos Leroi y l
Leroi -comenta se
no como otras veces, camino hacia Lero
quiere -golpea el h
darle tiempo, aprieto fuerte sus bolas y él se
ás. Escucho la risa de Leonardo y
inclinó por el dolor y cubrió sus
puedo evitar sonreír y
cintura-. Has venido sin sostén, me pr
por mi pierna y estoy
no viaja por mi muslo y sus dedo
ertas están abi
sus labios descienden por mi cuello. Levanta mi pierna y la coloca en su cintura. Estoy abierta para él, su mano haciendo maravillas con mi sexo. Su boca encima de mi seno, succiona por encima d
éctar! -susurra en mi oído y su
eaba en círculo mi clítoris y su n
mientras saca sus dedos y los lle
osa -me levanta y enrosco
a para ver la luna. ¿T
s pasos son largos. Me siento volando en sus brazos, su miembro duro como roca y me remuevo para cucarlo. Al llegar a la cabaña, abre con dificultad la puerta y la patea.
n sus ojos en mí-. Sabes bien que no soy de contestar, soy m
empuje. -Me relamo y sin más
-ronroneó Leonardo
morbo y olvido. El sexo siempre ha sido