/0/9035/coverbig.jpg?v=c041e8230d7a89ab95466fd94a9e983f)
Marco de Luca ha rehecho su vida sentimental en la hermosa Irlanda con una compañera de universidad, pero un día sin esperarlo recibe la dolorosa noticia de que su padre ha sido asesinado por los griegos, y decide volver una temporada a su Italia del sur para asistir al funeral y gestionar los problemas y documentos pertinentes de su familia. Lo que no sabe es que se reencontrará de nuevo con el amor de su vida, Elisabeth, y deberá también enfrentar su pasado y la pasión aún vivo que existe entre ellos, aún estando ambos en nuevas relaciones amorosas estables, ya que Eli también ha iniciado una relación seria con un chico honesto y atento de su trabajo. En un contexto de pasiones ocultas, muerte y caos, nuevos secretos oscuros serán desvelados mientras una conexión prohibida vuelve a comenzar entre ellos.
Puedo escuchar la lluvia azotar los cristales de la habitación, en aquel lugar era normal que cada día lloviese, y los días grises, repletos de nubes enormes y gotas frías empezaban a gustarme, a pesar de que me creaban cierta melancolía por el pasado que había dejado atrás. Solamente se escuchaba el sonido de aquella tormenta intensa y nuestras respiraciones aceleradas, la calefacción estaba encendida al máximo en toda la casa pero tampoco es que hiciese falta.
Ella, Jennifer, mi nueva novia, se movía sobre mí, cada vez más rápido y... ella gemía, prácticamente estaba gritando de placer, jadeaba, y me daba algo de vergüenza que los demás compañeros de casa, que estaban ya en sus habitaciones pudiesen escucharnos. Algo que para ser sincero se estaba convirtendo en habitual. Su cabello rubio fino se movía rápidamente hacia los lados y sus pechos pequeños y contorneados parececian bailar con cada uno de sus movimientos fuertes y seguidos que ejecutaba sobre mi. La situación, estar en aquel lugar lejos de lo que yo era y que me montase como ella quisiese me excitaba, bastante... Estaba a punto de correrme, de dejarme completamente ir , pero entonces Jennifer redujo el ritmo, si fuese por ella tendríamos sexo durante horas, le encantaba tenerme allí a su merced, justo de esa manera, teniendo totalmente el control del acto sexual.
Minutos después intensificó el ritmo y fue cuando consiguió finalmente que me corriese enseguida, y después a los segundos ella gritó. Estaba claro que debía habernos escuchado toda la maldita casa, como ocurría prácticamente cada día cuando llegamos de la universidad.
-Te quiero Marco...
Pronunció aquellas palabras sin más, justo al desvanecerse extremadamente agotada sobre mí y yo supe realmente que debía contestar, me sentí paralizado, atrapado , no queria pensar en querer, me traia muy malos recuerdos. Yo sentía aún ese dolor intenso en el pecho que había sido aun mas increíblemente enorme hacia un año atrás.
-Iré a ducharme - dije acariciando su pelo rubio claro, y entonces le di un beso en la mejilla y la aparté de mi lado con cuidado.
De esa forma, evité contestar y me largué a la ducha deprisa, esperaba que no lo hubiese notado y estuviese tan cansada después de aquello que no se hubiese dado cuenta de mi contestación evasiva.
Nada más entrar en la ducha el agua helada cayó sobre mí y sentí como mi corazón se paralizaba, después enseguida el agua se templó poco a poco. Fuera ya estaba oscuro, en Irlanda los días en invierno eran demasiados cortos y muy fríos, tanto que era normal que los cristales de las viviendas estuviese empanados por el ambiente helado. Los dos primeros meses fueron algo duro y confusos, como siempre estuve entre varias mujeres, pero enseguida llego Jennifer y ella me mantuvo algo mas estable, me divertía con ella y consiguió proporcionarme calma, aunque esto no pudiese aplicarse fuese a la cama.
Nosotros nos conocimos en la universidad de Dublín, yo iba hacia mi clase managment y ella me confesó que llevaba días observándome, sabía que pasaría por allí y se saltó su clase de escritura creativa para tener simplemente una excusa para hablarme, para entablar una estúpida conversación conmigo. Pero esto me lo confeso dos meses después de que estuviesemos juntos, no lo hizo al principio, supongo que hubiese sonado demasiado ridiculo, incluso algo escalofriante dadas las circunstancias.
-¿Tienes cambio para la máquina de cafe? He olvidado las monedas en casa... si pudiese cambiarme me harias un gran favor.
Recuerdo que me dijo muy simpática, su sonrisa era bonita y me atrapó enseguida, parecia feliz, en cambio yo hacia tiempo ya que no lo estaba.
Antes yo había escuchado aquella vocecita bonita con acento del lugar y me habia girado para encontrarme con una chica delgada, mucho más bajita que yo, de piel fina blanca y pelo largo rubio . Y con una sonrisa preciosa.
-Claro, espera... - contesté sorprendido, de que quedase alguien por los pasillos durante aquellas horas, y me dispuse a buscar en mis bolsillos para luego entregarle algunas monedas. Yo venía de trabajar del pub y siempre llegaba tarde. Le pasé las monedas pound algo serio y ella me sonrió, sus ojos eran verdes, hermosos.
Después de tomarnos aquel café juntos escuchando también la lluvia de fondo, porque en Irlanda siempre llovía y ese factor siempre estaba casi presente en cualquier ocasion... los dos quedamos para tomar otro, luego ella vino a verme a mi trabajo el sábado por la noche con unas amigas y fue ahí la primera vez que nos acostamos juntos, me invitó a su casa y yo por supuesto accedí, y rápidamente tuvimos sexo y me gustó, no estuvo nada mal, incluso me ayudó dejar de pensar en el pasado por unos momentos rápidos e intensos.
Me di cuenta pronto que no era una más, Jennifer tenía algo especial, me hacía sentirme bien, divertirme, reír de nuevo y no estar triste. No estar destrozado por ella, no pensar tanto en Elisabeth... aunque a veces aún soñaba con ella, a pesar de que hubiera pasado un año desde la última vez que nos habíamos visto y yo había descubierto toda la dolorosa verdad.
Sin esperarlo, Jennifer apareció en el baño y abrió la puerta de la ducha de par en par observando con mi mirada clara y una expresion maliciosa, que yo ya sabia lo que significaba, que deseba más de mi. Ella ya estaba desnuda, entró entonces dentro de la ducha, os dos nos miramos y luego, acto seguido, nos besamos de manera rapida. Puse mis manos sobre su cintura, la atraje hacia mi, la toqué por donde quise y la besé más de nuevo. Después bajé mis manos hacia sus caderas y entonces la elevé colocándola de espaldas sobre el cristal empañado de vapor por el agua esta vez caliente y apreté mi fuerte cuerpo contra el suyo, que era mucho más pequeño en comparacion. Y fue en ese justo momento en el que susurró mi nombre y yo dejé de pensar otra vez más.
Selena, una hermosa joven psicóloga de instituto, se ve envuelta en un entorno caótico y oscuro, con alguien peligroso sigue de cerca los pasos de su hija preadolescente, que ha estado oculta de su vida hasta entonces. Además, se encuentra de nuevo entre dos hombres, un apuesto compañero de trabajo y Alan, su antiguo profesor, convertido en empresario de éxito, y que fue el amor imposible de su pasado. ¿Podrá esta vez elegir lo mejor para ella sin caer en la tentación y la pasión más intensa? Y lo más importante... ¿En esta ocasión necesitará de nuevo ser salvada por un amor verdadero?
Siempre me había sentido en la sombra, una chica promedio que en lo único que destacaba era en las notas académicas, pero un día apareció un nuevo profesor, Alan, que hizo que me obsesionase completamente con él. Cuando hice aquel hechizo a Evelyn solo pretendía alejarla de él, nunca imaginé lo que ese acto de celos inconsciente provocaría. Ella, una estudiante hermosa y exitosa del último año de mi universidad, había sido víctima de una especie de ritual oscuro... interiormente me culpé a mi misma por lo sucedido, aunque yo no hubiese tenido nada que ver, así que me marché de la ciudad. Años después y a punto de casarme con un hombre maravilloso, decidí volver, no sabía que me reencontraría con Alan y entre nosotros renacería una pasión demasiado intensa para ser verdad.
Marco de Luca es el hijo pequeño de una familia millonaria muy poderosa del sur italia, dedicada a la venta de apartamentos y grandes villas de lujo, o al menos eso es a lo que dicen dedicarse en exclusividad... Increíblemente exitoso y atractivo parece tenerlo todo. Está a punto de casarse en un matrimonio pactado con la bella hija griega de otra familia influyente y a hacerse cargo de las empresas de su padre. Pero sin esperarlo deberá ir a España a encontrarse con una prima suya lejana para resolver asuntos familiares ocultos, que ocasionará en el nacimiento de una pasión fogosa y un romance intenso, y también en la abertura de un pasado oscuro lleno de secretos que no esperaba descubrir.
Durante tres años, Shane e Yvonne estuvieron casados, compartiendo noches acaloradas, mientras él aún estaba enamorado de su primer amor. Yvonne se esforzaba por ser una esposa obediente, pero su matrimonio se sentía vacío, construido sobre el deseo más que sobre el verdadero afecto. Todo cambió cuando se quedó embarazada, sólo para que Shane la empujara a la mesa de operaciones, advirtiéndole: "¡O sobrevives tú o el bebé!". Destrozada por su crueldad, Yvonne desapareció apesadumbrada y más tarde regresó, radiante de plenitud, dejando a todos boquiabiertos. Atormentado por los remordimientos, Shane le suplicó otra oportunidad, pero Yvonne sólo sonrió y respondió: "Lo siento, los hombres ya no me interesan".
"¡Ahh!". Ella solo podía gemir, a pesar de que no amaba a ese hombre; de hecho, lo odiaba. Las manos del hombre recorrían todo su cuerpo. Ella jadeó cuando él comenzó a bajarle el cierre del vestido. Este terminaba en su cadera, así que terminó con la espalda y la cintura descubiertas. "No me toq... ¡mmm!". El hombre movió sus dedos por su espalda descubierta y presionó su cabeza contra una almohada. Los toques le provocaron escalofríos a la chica. "Haré que te olvides de sus toques, besos y todo lo demás. Cada vez que toques a otro hombre, solo podrás pensar en mí". ---- Ava Adler era una omega nerd. Los demás la molestaban porque pensaban que era fea y poco atractiva. Pero Ava amaba en secreto a un chico malo, Ian Dawson. Él era el futuro Alfa de la manada Mystic Shadow. Sin embargo, a él no le importaban las reglas ni las leyes, solo le gustaba coquetear con las chicas. Ava no era consciente de la arrogancia de Ian hasta que su destino se entrelazó con el del joven. Él la descuidó y la hirió profundamente. ¿Qué pasaría cuando Ava se convirtiera en una bella capaz de conquistar a cualquier chico y, al verla, Ian se arrepintiera de sus decisiones? ¿Y si ella tenía una identidad secreta que aún no había descubierto? ¿Y si cambiaban las tornas e Ian le suplicaba que no lo dejara?
Una cita a ciegas llevó a Chelsea aquella noche al bar. La hermosa pelirroja llevaba dos meses conversando con Fred, era el momento de encontrarse. Mas por un motivo inesperado, él no puede asistir a la cita. Chelsea sin saberlo ve a un hombre sentado, solo, quien la mira insistentemente. Su actitud la lleva a suponer que se trata de su cita. -¿Fred? -pregunta ella con cierta duda. Él al ver que la hermosa mujer que lleva rato observando, lo confunde con alguien más, decide seguirle el juego. Luego de unas copas demás, van al hotel, es una noche increíble y es un sueño para ella despertar al lado de tan potente semental. Chelsea sale sin despedirse para su entrevista en Bullock&Company como asistente del CEO. Su sorpresa es cuando ve entrar a su oficina a Steve Bullock el hombre con quien había pasado la noche anterior. ¡¿Qué hará ahora que descubrió que su cita a ciegas fue con un CEO?! ¿Cómo reaccionará él, ahora que sabe que su aventura de una noche resultó ser su nueva asistente?
Linsey fue abandonada por su novio, quien huyó con otra mujer el día de su boda. Furiosa, ella agarró a un desconocido al azar y declaró: "¡Casémonos!". Había actuado por impulso, pero luego se dio cuenta de que su nuevo esposo era el famoso inútil Collin. El público se rio de ella, e incluso su fugitivo ex se ofreció a reconciliarse. Pero Linsey se burló de él. "¡Mi esposo y yo estamos muy enamorados!". Aunque todos pensaron que deliraba. Entonces se reveló que Collin era el hombre más rico del mundo. Delante de todos, se arrodilló y levantó un impresionante anillo de diamantes mientras declaraba: "Estoy deseando que sea para siempre, cariño".
Su vida era perfecta hasta que conoció al hermano mayor de su novio. Había una regla en la manada Night Shade: si el Alfa rechazaba a su pareja, perdería su posición. Y la vida de Sophia estaba relacionada con esa ley, pues era una Omega que salía con el hermano menor del Alfa. Bryan Morrison, el Alfa actual, no solo era un hombre de sangre fría, sino también un encantador hombre de negocios. De hecho, su nombre era suficiente para poner a temblar a las demás manadas, pues era conocido por ser muy despiadado. ¿Y si por un giro del destino su camino se entralazaba con el del Sophia?
Se rumoreaba que Fernanda, recién vuelta con su familia, no era más que una violenta pueblerina. Pero Fernanda se limitaba a esbozar una sonrisa despreciativa. Otro rumor sugería que Cristian, normalmente racional, había perdido el juicio, locamente enamorado de Fernanda. Esto la frustró. Podía tolerar los cotilleos sobre sí misma, ¡pero calumniar a su amado era pasarse de la raya! Poco a poco, a medida que salían a la luz las múltiples identidades de Fernanda como célebre diseñadora, experta jugadora, reconocida pintora y exitosa magnate de los negocios, todos se daban cuenta de que eran ellos quienes habían sido engañados.