img Cinco Años De Mentiras  /  Capítulo 4 | 45.45%
Instalar App
Historia

Capítulo 4

Palabras:890    |    Actualizado en: 08/07/2025

zados. Su cara era una máscara de furia. "Quiero q

ó helado. ¿Un

rdo, aunque no sonaba muy convencido

aprenda a respet

na a los ojos. Vio la satisfacción cruel en su mirada. Era la humillación

iendo los ojos de R

u cuerpo en una rever

o", repitió, cada palabra un

ido como había llegado. De repente, su expresión se suavizó en una falsa p

o, pero Mateo la ret

, dijo, su v

or su rechazo, otra ac

ateo. Solo me p

oger los cristales rotos, ignorán

ieras. Pero al meno

, la gobernanta, una mujer mayor que seguía las ó

uéspedes para el doctor Ricardo. Y me ha dicho que usted... que usted debería mudarse al

a sido su refugio durante cinco años. Ahora lo man

ió Mateo, sin levant

rapia", Mateo hizo la mudanza. El almacén era un cuartucho sin venta

ón y su mochila.

os los recuerdos que había guardado de Elena. Una flor seca que ella le había regalado una vez, una entrada de cine de una

iras, contenidos e

la basura del almacén, y la lle

última vez. Ya no sentía nostalgia,

jó a las

erdos. El humo negro se elevó, y Mateo sintió como si

esperanza. E

las llamas, hasta que

, encendió la televisión.

a noche", decía el meteorólogo. "Se esperan lluvias

agó la t

ña

z. Lo supo con una

ñana había sido la número cien. Pero la venganza de Elena no había terminado

posible, algo peligroso, en medio de la tormenta. S

eo ib

ectamente hac

sería bajo sus

en la Condesa, Elena tomaba un ma

ó Sofía, jugando con su copa. "Lo de mañ

una sonrisa

que Rodrigo se fue. Es poético, ¿no crees? Una torm

a hacer ex

un sorbo d

entras él está allí, temblando de miedo y empapado por la lluvia, yo lo llamaré y le diré que me equivoqué de dire

sa algo?", p

ombros con una indife

ino. Un justo castigo

engativa, sino a un monstruo. Pero no dijo nada. Estab

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY