n palpables como las raíces que sobresalían del suelo. Los espíritus revoloteaban cerca de
sando? -preguntó Aaron final
ncima del hombro,
o. Y todo indica que el
runció
que ver con esto. ¿Cómo
Rose, su voz cargada de indignación-. La corrupción no solo af
ono le hizo detenerse. Había verdad en s
n un silencio antinatural. Rose se detuvo en seco,
iene -s
de entre las sombras. Sus manos estaban envueltas en
. Qué interesante e
ras Rose levantaba sus manos, ro
res? -exi
dejó escapar
ción que teméis no es más que el comienzo. Vuestros mund
vanzó u
todos modos? -preguntó c
al instante, invocando raíces que se alzaron como un escudo, absorbiendo el impacto. Aaron aprovechó la dis
or la respiración agitada de ambos. Rose
grande de lo
u espada, su ma
lo, tendrás que empe
r un largo momento
no necesitarán los monstruos pa
escapar una
da c
no consciente de que la sombra que los acech