/0/8767/coverbig.jpg?v=cf93faeab9845a176c118129165a0468)
Patsy, es la principal protagonista de esta historia... Es una chica de 24 años, con un carácter fuerte y un temperamento que continuamente debe controlar. Es delgada, de baja estatura, rubia; es muy hermosa, elegante e inteligente. Está acostumbrada a una vida fácil, ya que no se le ha complicado en lo más mínimo conseguir lo que desea, sus papás tienen mucho dinero y han cumplido sus más mínimos caprichos desde niña. Pero, a pesar de que ha sido muy consentida, sobre todo por su papá Don Adolfo De la Garza, ella ha sabido mantener muy bien puestos los pies sobre la tierra. Siempre ha pensado que la vida puede dar giros muy drásticos cuando menos se le espera, es por eso que no ha sido una niñita que sólo despilfarre el dinero de sus papás, sino que se ha preparado muy bien, y está a punto de terminar sus estudios en administración de empresas con muy buenas calificaciones. Ella es alegre y siempre tiene energía para todo, y como es muy bella, tiene muchos pretendientes. Pero su corazón sólo le pertenece a un hombre, está muy enamorada de él y espera con ansia su llegada... la llegada de Carlos Santibáñez. Él ha sido su gran amor desde niña, y al parecer, él también está muy enamorado de ella. Sofí y Angie y Rita son sus tres hermanas, y ella, Patsy, es la segunda en cuestión de edad. Las tres hermanas con carácter y personalidad muy diferente al de Patsy, lo cual influye en las actitudes y acciones de nuestra protagonista. Todo era tranquilo y normal en la vida de la familia De la Garza, sin saber que muy pronto, algo inesperado y muy grave pasará, algo que cambiará totalmente su vida. ¿Podrá Patsy enfrentar todo lo que le espera? ¿Quién será su mayor soporte para que ella no decaiga en tan tremenda tarea? Acompáñame a indagarlo leyendo diariamente los capítulos de... "YO COMPRO ESA MUJER" Gracias de antemano por leer y dejar al final de cada capítulo tu comentario. Autora: MeryZu.
Con una postura muy segura, entró Patsy De la Garza al elegante y enorme edificio, donde su padre Adolfo De la Garza era el propietario y presidente de esa empresa de maquinarias.
Saludó a la recepcionista amable y educadamente, pero sin perder su arrogancia, dirigiéndose al elevador privado que la llevaría a donde se encontraba su padre.
Ella no necesitaba ser anunciada, pues todos ahí sabían que era la hija consentida de Don Adolfo, ya que de entre sus cuatro hijas, era la única que se interesaba en el negocio y la que éste consideraba más fuerte, segura y sensata.
Se abre el ascensor ya en la elegante oficina, y la rubia de 24 años de edad, con cabellera risada y ojos de color del cielo, esboza una simpática y alegre sonrisa al ver a su adorado papá.
-Papi... No te vi por la mañana en el desayuno, hoy sí que madrugaste.
-Si mi niña, salí más temprano que de costumbre porque tuve una cita muy importante.
Le comentó Adolfo mientras la abrazaba y besaba con mucho amor.
-Ya pronto terminaré mis estudios de administración de empresas y estaré aquí de tiempo completo para apoyarte en todo.
-Lo sé mi amor, espero eso con ansia. Además, tendré dos manos derechas, ya que en algunos días Carlitos por fin regresa de Francia y también él estará por completo aquí.
-Queeé... ¡¿Carlos regresa?! ¡Oh, no lo sabía!
-Cómo... ¿Que no estás en comunicación con tu gran amigo?
-En estos últimos meses se ha ausentado, creo que se debe a su estudio y trabajo. Pero creo que aun así debió decírmelo.
Aún y con algo de enfado por la falta de comunicación de Carlos, Patsy se sintió inmensamente feliz porque volvería a ver al gran amor de su vida. Un amor que ella había sabido ocultar muy bien ante todos.
Carlos Santibáñez, un hombre de 30 años de edad, muy guapo, alto y musculoso, rubio de nacimiento y también de familia muy adinerada. Tenía ya dos años de haberse ido a estudiar a Francia una maestría y un doctorado, muy inteligente el muchacho, con muy firmes y seguras convicciones.
La familia de Carlos y de Patsy eran grandes amigos desde hace muchos años ya. Las niñas De la Garza y Carlos jugaban desde pequeños y por lo tanto Don Adolfo quería a Carlos como un hijo, ya que él sólo había tenido las cuatro hermosas hijas. Y el padre de Carlos, ahora ya viudo, adoraba a esas niñas. Así que la empresa estaba en muy buenas manos, ya que Adolfo De la Garza y René Santibáñez eran socios, y en un futuro quedaría ésta en manos de Patsy y Carlos, puesto que eran como sus padres, muy interesados en la empresa.
Carlos con dos títulos, uno en administración de empresas, y otro en finanzas y economía; y Patsy estaba a punto de graduarse como licenciada en dirección y administración de empresas y mercadotecnia.
Los latidos del corazón de Patsy enviaron a su rostro una sonrisita pícara, la que casi estuvo a punto de delatarla frente a Adolfo.
-Qué sucede... ¿Qué estás pensando?
-Oh, nada papi, recordé que tengo algo por hacer y debo llamar a Cristóbal, uno de mis compañeros de clase. Sabes, tenemos un plan para fin de curso y la llegada de Carlitos me dio una gran idea.
-"Por poco y me descubre, pero esto ya no tendré que ocultarlo por mucho tiempo. En cuanto llegue Carlos le contaremos a todos que nos amamos y podré sentirme tranquila."
En eso llegó Don René muy contento y abrazó a Patsy muy emocionado.
-Mi niña... ¿Ya sabes que vuelve Carlos? ¿Me ayudas a organizar una fiesta?
- ¡Claro que sí tío René, estoy tan feliz como tú! Sólo me dices la fecha exacta y vamos organizándolo todo.
Lo abrazó cariñosamente y le dijo:
-Te quiero mucho tío...
Y se dirigió hacia Adolfo nuevamente abrazándolo y regalándole su sonrisa dulce y amorosa.
-Te quiero papi...
Y Patsy abandonó la oficina aún más feliz que cuando llegó.
Los dos hombres se sonrieron entre sí y se sentaron para hablar de negocios.
Ya en el estacionamiento, Patsy subió a su lujoso auto convertible de color azul metálico y condujo felizmente cantando una canción alegre que escuchaba. Iba absorta en su pensar y sentir.
Y de pronto...
-Oh no... ¡Hombre insensato!
Frenó bruscamente ante un automóvil que quedó frente a ella.
El hombre bajó de su auto muy molesto y se dirigió hacia ella...
- ¡¿Qué le pasa señorita?! ¿Qué no vio el semáforo que se puso en luz roja? ¡¿Pues en qué está pensando?!
Patsy quedó paralizada al ver a aquel hombre tan varonil, moreno, alto, con su barba cerrada y su cabello tan oscuro, que a pesar de la manera como le gritaba le pareció muy guapo, pero a la vez arrogante. Y bueno, ella no se quedaba atrás en cuestión de arrogancia.
Pero reaccionó, estaba muy habituada a hacerlo ante situaciones en las cuales podría exponer sus emociones.
- ¡Es usted un imprudente! ¿Cómo se le ocurre atravesarse cuando yo voy pasando?
Le gritó ella muy cerca en el rostro al hombre.
Éste sonrió muy divertido...
-Ajá, usted se pasa el semáforo en luz roja y yo soy el culpable. Perdón perdón, no vi que la reina iba pasando, debí detenerme en cuanto la vi... disculpe usted su majestad.
Se burlaba él mientras hacía una reverencia.
-Pues no soy ninguna reina, pero sí una persona muy importante e influyente en esta ciudad, usted no sabe con quién está tratando.
-"Pero qué bella mujer".
Pensó Diego.
-"Lástima que sea tan altanera y creída".
-Señorita, usted es quien no sabe conducir ni conoce las reglas de tránsito. Pero está bien no pasó nada, dejémoslo así.
Y él se retiró rápidamente del lugar dejando a Patsy bien enojada, ya que ella era la que debió haberse retirado dejándolo hablando solo tal y como él la dejó.
-"¡Es un estúpido engreído petulante! Afortunadamente no volveré a verlo. Yo seguiré feliz y cantando, no voy a permitir que ningún estúpido me arruine el momento".
Y subió a su lujoso automóvil y lo encendió, aumentó el volumen de la música y continuó con su canto.
Mientras tanto, en un hospital comunitario, Mayra, la mamá de Patsy quien era doctora, muy triste, tapaba el rostro a una de sus pacientes que acababa de morir y se quedó muy pensativa.
-Doctora Mayra... ¿Qué haremos con el bebé? Doctora, doctora...
La enfermera insistió ya que ésta no reaccionaba.
-Qué triste me siento, no pude salvarla. Vamos a ver al bebé.
Y se dirigieron a los cuneros.
Ahí se encontró a Sofí, la mayor de sus hijas, y quien a veces iba a apoyar como voluntaria. Ella cargaba al bebé que había quedado huerfanito.
Sofí era una chica de 26 años, muy dulce y tierna, rubia al igual que Patsy, se parecían mucho a su mamá, pero en cuestión de personalidad eran muy diferentes.
-Sofí, su mamá acaba de morir
Le comentó Mayra muy triste.
Sofí abrazó aún más al bebé y lágrimas asomaron en sus ojos y dijo:
-Pobrecito, con razón lo siento tan fuerte, quien sabe lo que le espera en su vida.
Mi nombre es Katia Espósito, mi apellido es el que le ponen a una huérfana porque mis padres me abandonaron en un orfanato de recién nacida. En una de esas salidas en grupo que tuvimos con las monjas conocí a un hombre maravilloso, nos enamoramos, y al poco tiempo él pidió mi mano a las monjas y nos casamos. Mi boda fue muy hermosa, pero no fue así mi primera noche a su lado como su esposa, ya que él me engañó y se burló de mí. Cuando traté de huir de su lado, mi destino cambió por completo, aunque en esos momentos no pude darme cuenta sino hasta años más tarde. Estudié, terminé mi carrera, regresé a la misma ciudad y encontré un trabajo en una muy buena empresa... mi destino estaba ahí y ahora sí me enamoré de verdad y profundamente... aunque... volvieron a burlarse de mí. Era ese hombre que años atrás me había rescatado de la tormenta, ese hombre que a pesar de no haber visto bien su rostro jamás había podido olvidar. Comencé a amarlo con todo mi ser, pero él también me engañó, y todo ese amor se convierte súbitamente en rencor. Ya no soy una muchacha sencilla, libre y feliz. Ahora mi corazón está esclavizado a tantas lágrimas hasta que se sequen. Tengo bien trazado mi plan de venganza ante Ivo, aunque no contaba con que mi exesposo iba reaparecer muy cerca de nuestras vidas, y eso desestabilizará mi vida por completo. ¿Cómo voy a hacer para volver a ser la misma? ¿Acaso el engaño me lo he hecho yo misma y sola me he dañado? Ahora quiero desprenderme de todo esto y se me complica, porque, aunque el AMOR ha florecido a mi alrededor, el odio ha contaminado muchas situaciones.
Peggy Tylor, una hermosa niña rubia de ojos verdes; creció entre animales, entre tierra y montañas, y al lado de su anciano abuelo. Sin casi notarlo, se va convirtiendo en una preciosa mujer. Una señorita de diecisiete años que recibe muy contenta la visita de su gran amigo Sam Dawson, cada vez que este sale de vacaciones de su escuela y regresa a casa de su tío. Con el paso del tiempo, Sam se comporta como un joven malcriado y egoísta que comienza a ver en Peggy la gran oportunidad para saciar sus instintos. Ingenua a todo esto que su gran amigo comienza a ver en ella, la hermosa salvaje se deja seducir por quien considera su amigo, pero cuando se da cuenta de la realidad de sus intenciones, ella decide comenzar una nueva vida incitada por el desprecio hacia los hombres. Pasa el tiempo, y la nueva Peggy, reaparece en la alta sociedad como Erika Ivanova, una mujer educada y elegante que solo conserva de aquella chiquilla harapienta su gran belleza. El encuentro que tiene con Alan Dawson, el distinguido y apuesto tío de Sam, hace que aflore en ella emociones desconocidas y contradictorias, que la hace dudar de su deseo de venganza y hasta de sus propios sentimientos.
Mi nombre es Katia Espósito, mi apellido es el que le ponen a una huérfana porque mis padres me abandonaron en un orfanato de recién nacida. En una de esas salidas en grupo que tuvimos con las monjas conocí a un hombre maravilloso, nos enamoramos, y al poco tiempo él pidió mi mano a las monjas y nos casamos. Mi boda fue muy hermosa, pero no fue así mi primera noche a su lado como su esposa, ya que él me engañó y se burló de mí. Cuando traté de huir de su lado, mi destino cambió por completo, aunque en esos momentos no pude darme cuenta sino hasta años más tarde. Estudié, terminé mi carrera, regresé a la misma ciudad y encontré un trabajo en una muy buena empresa... mi destino estaba ahí y ahora sí me enamoré de verdad y profundamente... aunque... volvieron a burlarse de mí. Era ese hombre que años atrás me había rescatado de la tormenta, ese hombre que a pesar de no haber visto bien su rostro jamás había podido olvidar. Comencé a amarlo con todo mi ser, pero él también me engañó, y todo ese amor se convierte súbitamente en rencor. Ya no soy una muchacha sencilla, libre y feliz. Ahora mi corazón está esclavizado a tantas lágrimas hasta que se sequen. Tengo bien trazado mi plan de venganza ante Ivo, aunque no contaba con que mi exesposo iba reaparecer muy cerca de nuestras vidas, y eso desestabilizará mi vida por completo. ¿Cómo voy a hacer para volver a ser la misma? ¿Acaso el engaño me lo he hecho yo misma y sola me he dañado? Ahora quiero desprenderme de todo esto y se me complica, porque, aunque el AMOR ha florecido a mi alrededor, el odio ha contaminado muchas situaciones.
Paola Fischer vive un matrimonio aparentemente feliz hasta el día en que, al regresar a casa, encuentra a su esposo, Lucas Hotman, en la cama con su secretaria, Rose Evans. La traición la deja destrozada, y, sin saber cómo enfrentar el dolor, se marcha de su hogar. Esa noche, en un bar, conoce a un enigmático desconocido que le ofrece una compañía inesperada. Buscando escapar de su desilusión, Paola se entrega a una noche de pasión con él, dejando que el dolor de su traición se diluya en la intimidad. Al día siguiente, trata de seguir adelante, pero pronto se enfrenta a una sorpresa que cambia el curso de su vida: está embarazada, y el padre no es Lucas, sino aquel hombre al que apenas conoció.
Rose había descubierto la traición de su esposo, y en un impulso de venganza, toma una decisión radical: casarse y luego escapar, llevándose consigo la fórmula secreta que hará a Ethan Miller un hombre poderoso. Fingiendo su muerte, huye a un país lejano, donde comienza una nueva vida bajo el nombre de otra persona. En su nuevo trabajo, conoce a Jackson Heinz, un chef talentoso, gruñón, soltero y con un carácter de fuego, que parece ser el opuesto perfecto a su difunto esposo. Mientras la atracción entre ellos crece, Rose se ve atrapada entre su identidad oculta y los sentimientos que nunca imaginó despertar. El destino ha lanzado sus dados, pero ¿puede Rose mantener la mentira y, al mismo tiempo, enfrentarse a un amor que no estaba buscando?
Tras ser expulsada de su casa, Harlee se enteró de que no era hija biológica de su familia. Se rumoreaba que su empobrecida familia biológica favorecía a los hijos varones y planeaba sacar provecho de su regreso. Inesperadamente, su verdadero padre era multimillonario, lo que la catapultó a una inmensa riqueza y la convirtió en el miembro más apreciado de la familia. Mientras esperaban su desgracia, Harlee poseía en secreto patentes de diseño valoradas en miles de millones. Por su brillantez, fue invitada como mentora a un grupo nacional de aviación, atrajo el interés de varios pretendientes adinerados y llamó la atención de un misterioso personaje, ascendiendo a la cima del mundo.
Dorian Borges es un empresario bastante reservado, al punto de que algunas personas creían que no le gustaban las mujeres incluyendo su secretaria de repuesto. Pero estaban muy equivocados, este hombre era un amante del sexo morboso. Follar era su pasión, y aunque nadie lo pillara con una mujer en las noticias, no quería decir que no se llevara a la cama a muchas. Y una de estas era su secretaria de repuesto, luego de que su actual asistente dimitiera, él contrato a una mujer nueva que con solo verla una vez supo que tendría sexo con ella en la oficina. Puesto que su mayor fantasía era follar con una secretaria en su despacho, pero como su antigua asistente tenía 8 meses de embarazo nunca logro hacerlo. Pero ahora era distinto con Catrina Hans, Dorian seducía a su secretaria a cualquier hora, hasta conseguir que ella le abriera las piernas para poder comerle el coño... él no creía en el amor, solo le gustaba tener sexo sin compromiso, pero todos terminan bebiendo una sopa de su propio chocolate. Cada capítulo es muy caliente hasta el punto que te humedecerás... ¡que te diviertas!
Una chica que solo quería llegar a ser alguien en su vida. Nunca espero que su madrastra y su hermana tuvieran el plan más malvado, de quitarle la su más preciado. Una noche bajo una lluvia intensa. Shasha Yan, perdió su virginidad por un hombre desconocido. Tras ser humillada por su familia, huye. Ocho años más tarde regresa con tres tesoros, que la vida le regalo. Tras ser una mujer fuerte y exitosa ahora. Su vida es otra. Regresando como una diseñadora famosa, y sus tres hijos en busca de quien es su padre real. ¿Podrá shasha perdonar a su familia?, ¿podrá ella, volver a amar después de la traición? ¿Aceptará ella, a este hombre que se identificó como el padre de sus hijos?