Miró al padre y a la hija que tenía ante ella con una indiferencia glacial. El resentimiento, cult
ía ignorado, prefiriendo mimar y pro
soñado con el amor de un padre. Pero ahora, de
el peso del desprecio de Valerie y, sin darse cuenta, retrocedió unos pasos.
ía el estómago. ¿Cómo había podido estar tan ciega? ¿Cómo pudo
mientras la fulminaba con la mirada. "¡Mocosa insolente!", rugió, con
dre?". La voz de Craig retumbó, pero detrás de su ira se oculta
una ola de pánico la invadía. "¿Mi madre? ¿De qué hablas? ¿Qué
Tranquila. Solo la saqué del hospital", respondió, arrast
mbló, y la furia en su inter
a salvarla. Abandonó la ingeniería mecánica para estudiar medicina con e
un instituto de investigación médica, donde logró av
ba la vida de su m
uria que había deformado su rostro momentos antes se disipó, ree
No puedo permitir que Lacey se case para cuidar a un vegetal por el resto de su vida. Pero como tú ya
alerie era un
del Grupo Holt? ¿Un acc
dente tan grave pa
bo rápidamente. Nada de eso importaba
importaba e
lerie entre dientes. Su voz, aunque ronca, estaba carga
y fría. Se quitó las gafas con parsimonia y comenzó a li
da de amenaza. "Mañana vendrá alguien a llevarte con la familia Holt. Si quieres volver a ver a
a se inmutó al mirar la figura temblorosa y furiosa de Valerie. Era
uín para curarle con cuidado el dedo herido. Su tacto era su
erie. Ver a Craig mimar a Lacey mientras la chantajeaba con
el bien de su madre, Valerie no tenía otra opción. Re
olucrarse con la familia H
, gritó Valerie. Apretó los puños con tal f
ellaron en una línea fina, y sus ojo
e estuviera a salvo, se aseguraría de saldar t
ó el tiempo. Se vistió rápidamente, list
nto de salir, algo captó su a
do en oro con un diseño inconfundible: una lun
creaci
nte misterioso le había encargado esa pieza por
orio de lujo, sino también como una herramienta equipada con un localizador
ía termin
lvió entrecortada mientras su m
en a quien se pudiera tomar a la ligera. No podía permitir
levemente mientras sacaba una de
hasquido seco resonó en la silenciosa habit
alquier problema que e
sabía que no era