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Historia
De prisionera a fénix: el arrepentimiento de él

De prisionera a fénix: el arrepentimiento de él

Autor: rabbit
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Capítulo 1

Palabras:1752    |    Actualizado en: 28/08/2025

rabajaba en dos empleos para poder pagar las cuentas, cuidaba de sus heridas y pensaba que nuestro amor era lo único que

gante tecnológico Gavin Hawkins, CEO de Hawkins Industries, anunció hoy su compromiso con la vicepresidenta Heidi

o había tallado con esmero para nuestro aniversario, mientras la besaba de una manera intensa y posesiva. El estómago se me revolvió,

puestas. Allí lo encontré, riendo con Heidi, como si yo no existiera. Ignoró mi llamada y me envió un men

atravesó mi cabeza, y entonces los recuerdos regresaron. El accidente no había sido tal: Heidi conducía aq

omprobar si lo amaría incondicionalmente. No era un esposo, era un monstruo... y yo, su prisionera. Pero la r

ítu

ños creí que é

la peor parte de la ciudad. La pintura se descascaraba

y de noche limpiando oficinas, s

mantenerse a flote. Llegaba a casa agotado, lleno de moretones

evoto del mundo, que mi sonrisa er

ria. Él me encontró, me cuidó y aseguró que estábamos casados. Nun

cina. Había juntado propinas durante semanas para comprarle

tadora anunció con entusiasmo: "El gigante tecnológico Gavin Hawkins, CEO de Haw

a, molesta por

uedé h

lla estaba

mento y tenía el brazo alrededor de una mujer impresionante con

urré. No

ue tratarse de alguie

la, la cicatriz sobre la ceja izquierda de la que me había

a

Gav

r, Heidi Daniel. No fue un gesto rápid

ogió, la cabeza comen

ces l

plata, estaba la figura de pájaro tallad

nas en esa pieza, la había tallado con paciencia y se la regalé en nuest

miles de dólares, mientras besaba

uve que apoyarme en la

impregnando la cocina con

baleándome. Necesitaba verlo

tan temblorosas que apenas pude

le pedí al conductor

, fijándose en mi ropa gasta

cond

o y acero, a años luz de mi barrio deteriorado.

n Hawkins", le dije

ada, con una sonrisa b

oy su... lo

temo que no tiene tiempo para...". Hizo una pau

: "Gavin, cariño, la pre

a en persona. Caminaba hacia los ascen

Gav

a inclinada hacia

Él le susurró algo al oído y ella rio

raición era fría y cortante,

s años habían si

, que las piernas iban a cede

pantalla agrietada. Marqué su nú

sonrisa se le borró en cuanto vio mi nombre en la pantalla. Mir

ue me vería. Que nuestr

llamada y volvió a deslizar

pareció segu

edo hablar. Llegaré tarde esta

Un sollozo escapó de mi garganta, crudo y des

tenía frente a mí, mi

a vida era

a que pudiera pagar sus "suplementos de entrenamiento". La

una bro

ó mi cabeza, tan inten

recuerdos lleg

os tres años, sino d

auto nunca fue

. Recordaba a Heidi Daniel al volante, con esa s

ido su protegido, el alumno más prometedor. Después de que él murió

a cuando lloraba, se aseguraba de que comiera. Se hizo cargo de la em

e quería, lo conseguía. Decía que yo

e lo normal. Una noche confesó que me había amado durante años. Yo era joven, estaba de

Ambiciosa, hermosa, despiadada. A él le intrigaba. Comen

eleamos. Le dije qu

tarle, tomar mis llaves y salir

hoque. Después,

asegurándome que era su esposa, Ainsley Lara, y que

a una vida. Una men

ficción, la construyó co

a pobreza para comprobar si lo seguiría amando sin condi

insoportable, como si mi c

ad notó mi estado. "¿

destrozado mi vida, mientras subía al ascensor con su

, sus ojos finalmente se encontraron

una chispa de fastidio, como si mirara u

olo se quebró.

sificó, un calambre intenso hizo

, gritó el

sonido era el rugido en mis oído

de fregar pisos y lavar platos. Pens

dor en apuros.

ra solo s

prisi

da se apoderó de mí, r

dría con

ría su

simulando mi

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