era sabía que llevaba se levantó de mis hombros. La fecha de cierre que el agente inmobiliario ha
ntí l
pendiente y compré una primera edición de "Matar a un ruiseñor", el favorito de mi
a y me dio un
. Te voy a ex
ré, tía Caro -dije, co
a, sus amables ojos e
de esto? ¿De de
je, entregándole
ilo para sanar antes de que comenzara el siguiente capítulo de mi vida. Pasamos el tiempo
paraba para irme, me puso una peq
n los ojos empañados-. Quería qu
a un simple y elegan
herm
tía Caro, abrazándome por última vez-.
o negro se detuvo. Daniel e Ismael se bajaron, con Jud
risa de alivio en su rostro-. T
n sus ojos al recordar su promesa de mantener en secret
con voz tranquila. Miré de sus rost
no casual-. ¿A dónde vas? Te extraña
esto no era solo un viaje, pero le la
mi atención a la chica qu
ece que te s
ndo muy bien. Insistieron en que me mudara a la habitación de invita
o y pequeño giro del cuchillo. Se estaba mudando
un gesto casual y posesivo. Era una declaración clara. *E
-dijo Daniel, sus ojos en
a tranquila confirmaci
mi tono perfectamente uniforme-. Bueno,
delante-. Déjanos llevarte al aeropue