amente la cuchara de madera en la olla de barro, preparando el café de olla que a su esposo, Pedro, tanto le gustaba. Faltaban solo dos días para su an
s, jóvenes, el día de su boda. Ahí estaba Juan de niño, con su uniforme de la escuela. Y la foto más reciente, la de la boda de Juan con Elena
trando un poco los pies, pero
eja", dijo, abrazán
a, apoyando su cabeza en el hombro de é
antes de que el mundo comenzara a hacer ruido. La anticipación de la celebración flotaba en el aire, una alegría tranquila y profun
de la casa sonó, rompiendo la ca
ció, pasándole el
de Sofía
gro. ¿Cómo está
oco apurada como siempre. "Te hablo rápido. Oye, para su
le ilumin
ado. Con que vengan a comer con
a caja de mariscos frescos de Ensenada. Langosta, camaró
ternura por su hijo. A pesar de todo, a pesar de que sentía que Elena lo manejaba a su a
detallazo. Aquí los esp
a se encargará de coordina
a ti, hijo
Pedro la noticia y él también se emocionó. Pasaron el resto del día haciendo
o, sobre una cama de hielo, reposaban los mariscos más impresionantes que había visto en su vida. Langostas rojas, c
igerador, su celular sonó. Era un
uen
oz del otro lado, seca y directa,
ísimas gracias por el regalo, de verdad
luego hizo una pausa. "Le llamo por eso, preci
se sentía pesado en su mano. Escu
ja? Creo que se
cia, como si le estuviera explicando algo obvio a una tonta. "Del marisco. Necesito q
helado en el estómago. Miró la caja de unicel vacía sobre el suelo
fía, con la voz temblorosa. "Juan dijo qu
"Las cosas cuestan, suegra. Juan les quiso dar el gusto, pero ese dinero lo teníamos apartado para la ins
un regalo. No solo eso, se lo estaban cobrando a un precio que ella sabía, instintivamente,
idad es... es muchísimo
quieren ayudar? Porque si no, no hay problema, paso por los marisc
ragó. No le iba a dar esa satisfacción. La rabia empezó a reemplazar a la conmoción. Era una extorsión
edro", dijo finalmente
ucho", concluyó
a su familia adelante. Pero nunca, jamás, se había sentido tan insultada, tan profundamente herida. Este no era un problema de dinero. Era una traición. Una bofetada en el alma en el umbral
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