enavides, fueron secuestradas al mismo tiempo. Esa noche, en el escondite de los
dico confirmó que amb
el hijo que ella esperaba era suyo. El hijo de Ximena, en cambio, se convirtió en el
jarrones de cristal, los marcos de fotos, todo. Se gir
mos antes del secuestro, y sabes perfectam
a una mezcla de dolor y culpa
elicada desde que era una niña, los
isa amarga escapó de sus labios, mientras l
sí puedo s
a, tan cansada que ya no quería amarlo más, tan cansada
.
ojas sostuvo el acta de divorcio, miró el espacio en
ombre de mi esposo,
ncómodo en su silla,
na decisión por el señor Benavides? Por fav
ado que llenó la pequeña oficina. Sacó su teléfono y l
o, dile que lo nec
enía solo, seguido por un empleado de la mansi
Rica
e inclinó res
a Sofía a comprar unos pasteles en el centro. Dice que cu
o y profundo, pero se esforzó por mantener
cualquier cosa
levemente, mantenien
dijo que haga lo que usted quier
nta de emociones que amenazaba con desbordarla. Luego, levant
do firmar po
evemente, esta vez
nte, s
icardo Benavides en el espacio en blanco. Al despedirse, c
en un mes. Si se arrepiente, puede retractar
sonrisa suave pero cargada
a me arre
io, ella lo i
er, simplemente paró un taxi y se dirigió sin de
más fuerte de pas
ió de inmediato, era difícil no hacerlo, Ximena era conocida como una de las mujeres más bellas de l
abajo a un lado y sonrió c
órmula especial, es incolora e insípida, incluso si la disuelve en
es de añadir con u
damas de la alta socieda
ricos rara vez podían tener hijos, las esposas legítimas
es pa
convencerla de que lo pensara mejor, argumentando que una madre es valorada por su hijo, pero una vez que X
adieron. Recordó cómo Ricardo la había cortejado. Ambos eran jóvenes entonces. Su familia organizó una gran fiesta para que Ricardo entrara en el círculo de poder,
distante con las mujeres, pero cortejó a Ximena durante un año entero. El día de la primera nevada, colocó novecientas noventa y nueve rosas importadas de España frente a la casa d
as actuaba, una cuerda del piano se rompió de repente, y la sala quedó en un silencio incómodo. Ricardo se acercó a ella y le dijo: "Te acompañaré." Sacó su flauta de plata y toca
trató como una joya, y la boda fue la más lujosa que la ciudad había visto. Lo único q
buelo salvó la vida de mi abuelo, y ahora que la famili
mágico a tomar el té, pero canceló porque Sofía tuvo fiebre. En su aniversario de bodas, Ximena preparó una cena sorpresa, pero él se fue porque la asistente de Sofía lo llamó, d
o por Sofía, él negó a su propio hijo. Siendo así, ella
su alma también había sido arrancada. Se bajó lentamente, sus piernas temb
o lejos que la hizo sentir como si cayera e
a, ahora estaba sentada Sofía. Y su esposo, Ricardo, estaba arrodi
s entrecerrados. "Ricardo, dicen que cuanto más patea u
vientre de Sofía, con una voz t
que el bebé
confrontarlo, preguntarle si sabía que mientras él esperaba con ansias el nacimiento del hijo de otra mujer, su propio hijo se estaba
a la pareja bajo el sol. Toda la ira, la pena y la frustración s
cuando de repente la voz de
ime
onaba so
ste medicamentos