harro de palabra y honor, f
iste reflejo de los deseos de
de silencio, tomé una decisió
ás. Ricardo no hizo el menor intento de acompañarme al e
puesto a salir, con la cena que yo había pr
ara indiferente, pero la enfe
ndí un documento. Dije que era un permiso
una palabr
dido, con su último aliento, que no cu
ba ocupado con la patria.
escritorio estaba ahora
apareció, chillando. Detrás de ella
¿Desde cuándo te has
ena y se cayeron mis papeles, R
enuncia? Y es
te, mi corazó
podía pensar en una cosa: el
endación para Ximena? Con tu ayuda, seguro que tie
ue le entregué. Pensé que sería el pago f
o se indignó al ver el mole, las enchiladas,
aste tantos platillos qu
un restaurante, dejándome sol
Ricardo finalmente
fía le dejó una carta! Es... es un
prensión y dolor. Ximena, con el tobillo lesion
¡A
sufrimiento. Ciego a la verdad. C
olpeó la puert
to! ¡Yo no firmé
tó el mensaje sobre la muerte de mi padre, negándome l
nteró de la verdad,
e su propia creación, solo
, mientras ayudaba a los niño
vo. Parecía más delgado, más c
no fue l