de mariachi, mi pequeña Sofía Jr. riendo en la piscina y mi esposo, Carlos, co
n una mueca de dolor. Anunció que Sofía Vargas, o sea yo, era infiel. La pantalla gigante most
, Sofía Jr., se levantó la blusa, revelando horribles moretones y acusándome: "¡Mami es mala! ¡Mami me pega!
ntil, desfalco. La gente me atacó, arañó y golpeó. Caí al suelo, viendo a mi famil
ré el calendario: 4 de mayo. El día antes de todo. No estaba muerta. Había regresado. Y esta vez, no