o mejor tequila extra añejo, el que mi familia reserva para celebraciones especiales, y me sen
o sonó. Era uno de mis primos, un entusiasta
asar aquí," dijo, su voz ahogada por la
ondí, tomando un
Julio Vega se le acercó. En medio de todo el mundo, prima. Le preguntó a Mateo sobre su familia, sus raíces, quiéne
te círculo, no nos importa el dinero. Nos importa el honor. Nos importa el linaje. Y un hombre que no respeta el linaje de
en la o
pasó d
hablar con nadie. Lo humilló frente a todos. Diego se puso pálido, intentó decir algo, pero Don Julio simp
ualización, primo.
ila de un trago. El sabo
de Diego entró derrapando en el camino de entrada. Oí la puerta
a, su rostro era u
o arruinaste todo! ¡Humillaste
rsación con un viejo amigo de la familia. Le advertí que un invitado podría no entender n
alándome con el dedo. "¡Llamaste a
Mateo es un arribista que usó mi taller y mi historia para su propio beneficio. Don Julio simplemente reconoc
! Después de esta noche, nadie en Guadalajar
ltarme al respeto y salirse con la suya. Y tú, Diego, lo permitiste. Cada paso del camino. Así que
cha de que por una vez, haya habido una consecuencia real
n impotente. Vio la determinación en mis ojos y supo que no había
es y sociales de la ciudad. Se convirtió en una anécdota, una advertencia sobre los peligros de la ambición desmedida y la falta de
observé desde la ventana de mi estudio en casa, que daba a la calle. Lo vi esperar un taxi bajo el sol abrasador, una figura patética y derrotada. El traje
fondo de mi corazón, que la guerra estaba lejos de terminar. Diego me había subestimado una