se preparaba para sus deberes en la corte, lo d
y esperando a nuestro hijo, me preocupo más por tu bienestar, pasas tantas horas
a de sorpresa y un toqu
e refiere
e en un rincón de la habitación. «Me ha servido durante años, y no podría confiar en nadie más. Me sentiría mu
yo conocía demasiado bien. En mi vida anterior, fue Elena quien, corrompida por las promesas y regalo
zcla de miedo y una cruel satisfacción. Ella pensó que al ayudar a Valenti
nte al príncipe, esa misma ambición brillaba en
, su mente calculadora tr
, Sofía, no puedo sim
de tener una espía, o al menos a alguien leal a su esposa a su
bé dependen de mi tranquilidad, y no estaré tranquila hasta saber que estás bien
ncionó a la perfección. La mención d
enuencia. «Elena, a partir de hoy, servirás en mi
a reverencia profunda, incapaz de ocu
fa de las lavanderas del palacio, vino a ve
dijo, arrodillándose ante mí. «Ha honrado a nu
isa serena. «Elena es una buena c
rialdad glacial. Había colocado a mi traidora justo en el corazón del territorio enemigo. Elena, con
era del poder, pero yo acababa de empujar