es a medida y correos electrónicos sin una sola coma fuera de lugar. Allí, todo se medía: el tono, el volumen, el protocol
no y una carpeta de papeles en la otra. Iba vestida con una chaqueta
cer egos, vine a
en pijama. Uno de los asistentes de operaciones -siempre impecable, con corba
o de vestimen
ue si no, ya deberían actualizarse -le respo
or la oficina. Algunos la miraban con curiosidad, otros con
rió una invitación a una reunión con el comité de expansión. El mensaje era v
-cosa que ya se había vuelto costumb
el correo es un desastre: sin orden, sin objetivos, sin un solo
Llevaba la expresión que reservaba
por aprender a
le a tu equipo a escribir co
tó la m
e que lleva más de una
s. Imaginate lo que
cia ella con esa calma peli
tu lengua afilada. Necesito que me mante
e entienda que el respeto
su asistente. Nunca nadie lo llamaba así. Nadi
ta cruza
en para algo más que deco
con un despido fulminante. Pero en esta oficina, con estas dos fuerzas tan distintas, l
te? -preguntó
abo de reescribir tu presentación de esta tarde. Le saqué
a de molestia y -aunque nun
o que quiero dec
a puerta-. Pero alguien en esta empresa debe
ntimiento de que esa mujer no era un error pasajero. Era una
y observando cada gesto. Cuando él empezó a leer la nueva versión de su discurso -el que ella había modificado sin pedir pe
n tiburón de inversiones
s claro. Directo
al salir, al pasar junto a Marina en el pasillo
n tr
n levantar la vis
ada,
st-its de colores. En lugar de los típicos saludos corteses con los otros asistentes, lanzó un "Buenos días,
ting, Marina cometió el "pecado capital" de interrum
cía como un sobre sin carta? Estamos hablando de c
se congeló. Pero Mateo, que escuchaba desde el otro extremo de la sala, n
odos salían con sus tablets y la
ás rompiendo cada regla de
de que nadie se du
rada gélida de siempre. Pero es
a ser invisi
si lo intentara, s
r unos segundos
nto te dura
más que tu
Pero Marina la escuchó. Y la guardó como un pe
e RRHH- pasó por la oficina de Ma
o de Marina. Hay que enviarlo a
tomó si
aluación
encogió
uicida. Pero hay algo en e
o as
por eso
so es
s inte
ó y salió si
: en una camiseta con una frase atrevida, en una presentación que conectó con di
cuánto
guien en su equipo que lo hacía replantearse si el sile
tan inquietante