uros prometían violencia. "¿Estás loca? ¿Crees que voy a creerm
ago, pero mantuvo la calma exterior. "No t
puño. Los vasos y platos temblaron. La gente a s
e no contestaría, estaba en reuniones importantes preparando el lanzamiento de una nueva empresa,
, tres veces en el silencioso sa
mila. "Vaya, parece que tu prometido está
un siseo venenoso. "Es todo una mentira
ono, sus manos temblaban de rabia e impotencia. No dijo nada más. No te
illo que conducía a los baños. Escuchó voces provenientes de una pequeña antesal
"Esa obsesión que tiene conmigo es una enfermedad. Es una vergüenza para la familia. Mi
Se tapó la boca para ahogar un sollozo. Así que eso era lo que realmente pensab
Era Camila, que la miraba con una sonrisa triunf
eres más que una vergüenza. El amor que sentías por él, tu ridícula persecuci
de alejarse, pero Cami
terminado contigo", siseó. Y entonces,
o, pero sus manos solo encontraron el aire. Cayó hacia atrás, su cabeza golpeó el borde afilado de una me
te posterior de la cabeza. Camila estaba de pie sobre ella, con una expresión de f
señalando a Sofía. "¡Me atacó! ¡Estab
aba vueltas y las palabras no salían. Solo pudo mirar a
io. Solo vio lo
iendo hacia Camila y rodeándola con sus brazos
asustada", sollozó Camila, ent
Siempre eres tú, ¿verdad? Siempre causando problemas. No te basta con
usurrar Sofía, pero
era mortalmente fría. "Estás e
agarró bruscamente del brazo y la le
susurrando. La humillación era total. La metió en el asiento trasero de su coche y le di
amor?", le preguntó con una ternura
aquí", respondió el
ola sola en el coche con el chófer, abandonada una vez más. El resto de la gente del evento se
ción, el dolor en su cabeza era un martillo constante. Se miró en el espejo. Tenía u
el dolor físico era casi un alivio comparado con el dolor emocional que la consumía.
i el cielo estuviera llorando con ella. El viento aullaba, un sonido desolado que hacía eco en el vacío de su corazón.