o, pero me contuve, él no tenía por qué saber mis motivos, pero lo peor de todo es que no me dejó llevarme a mi pequeño a casa ¿Qué haría con Niccola hos

n Franchesco, pero no lo podía permitir. En esos momentos detestaba a mi padre y a todo aquel que fuera de su sequito, incluso le reclamé a Doménico que no hiciera nada y dejara morir a su hijo, pero él con sus cánones y lealtades me recordó que el vivir en la cosa nostra era

mano izquierda y capo del norte de Ventimiglia y aunque habían pasado los años ese tipo no olvidaba el desaire que le había hecho ese día. Además, mi padre ya

ojos encolerizados de ese doctor no me los podía sacar de la cabeza, es que era tan, pero tan prepotente. Se creía

lgo por el estilo, unos ojos verdes y el pelo rubio desarreglado, podría pasar por surfista y ni cuenta me daría de que es médico, pero ni toda esa test

verdad me encontraba tan desganada y con tanto cansancio que, al final, me quedé d

para avisarle que debería faltar porque Nicco estaba hospitalizado. Lucía me regañó por no avisarle desde un principio, que cómo podía ser ta

mantendría informada y que una vez que Nicco sali

der llevármelo a casa. Tomé el metro como cada mañana, pero ahora dirigiéndome hacia el hospital. Llegué y al preguntar por mi hijo me inform

con otros dos hombres y una mujer muy hermosa de ojos color cielo que se reí

a a ti cuando te

que el doctor tiene contactos con la

bían informado que podría tener noticias mas certeras de mi hi

ora que estaba de turno me atendiera. La sorpresa fue mayor al ver a Val Scott llegar al lugar y enterarme que era ella la doctor

storial de inmediato ¿Por qué

cambiaron para la semana siguiente y nunca pensé que Nicco suf

iendo las anotaciones de Nathan y si sigue así

que le suceda na

e Nicco pueda recuperarse, pero deberás aceptar l

es q

cabo de estar con mi

el día que apr

er

ra Piaggio, que bueno que llegó, a Niccola ya

e todo a Val, sino fuera por la llegada de él-. Aquí

con

sponde Val, tranquilamente y el doctor se oone rojo, ya imagino todo

er mi ronda y una vez que ustedes dos te

Bruno que yo me haré cargo del caso

uién llevará el caso

amos quedando ¿Cierto Gia?- Val me mira y me guiña un ojo y no me queda de otra que ase

señora Piaggio- me dice molesto y luego se dirige a V

e a ver a ver a tus paci

te solas y Val me volvió a hablar más tranquila. Me explicó como sería la intervenc

debería ser operado, pero cada minuto en este hospital ha

con viento fresco al enterarse de todo? O peor aún que nos echaran al agua con esa gente, necesito acelerar las cosas es imperioso que los exámenes de Nic

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