cambiar llegando a ser
dsworth
asa, para lograr su sueño de ser bailarina, Isadora co
nos había abandonado cuando yo tenía como cinco años; mi madre se volvió a casar con Joaquin. Él no era un hombre del todo malo, sin embargo, comenzó a mirarme de otra forma en la medida que fui c
te casaste?–
o. Era el marido de mi hermana más joven, pero yo no
ivían
, eran muchos los buitres que se te presentan. Luego conseguí trabajar en un pueblo cercano, en un restaurante, tendría en ese entonces unos veinte años. Un mes antes llegaron unos guardias nuevos al pueblo. Ellos estaban en la alcabala de la entrada. Él subió al bu
uéntame tía,
dijis
Disculpa m
Siempre quise tener una niña como tú–
iste nun
No
Es tan romántica–dijo entre
sentó. No podía creerlo. Él estaba con mi hermana y yo había sido suya. Después de allí, intentó disculparse y me pidió vernos. Estábamos en el campo ce
y! Qu
los cuentos. Así que a trabaj
mientras Isadora, abría las santam
as mientras ella atendía la cocina y la caja, pero no había salido aún de su habitaci
te de la caja?– l
esto. Yo
inistradora" piensa, pero su sueño es bailar. Los clientes más asiduos al lugar, la miran y murmuran
bastante movido. Siendo ya las diez, había merm
ás bien? ¡nec
dora. No e
la encontró en su cama,
ntras se acercaba y la toca
y mal, me due
e! Déjame colocarte una to
la toalla, la mojó y lue
para la fiebre y un té de li
creo que me
da eres! Aguarda que te preparo
a Felicia, minutos después ella a
bas muriendo? –
n fácil desh
cía seguía ayudando desde la caja, en la cobranza. Pero ya se sentía algo cansada de estar parada, no era que el t
anarse por lo menos el derecho de dormir otra noche en
a la casa del lago pero no había hablado con Isadora para que le prestase algo decente con que ir ha
descansar Lucía!,
de verdad nece
edarte. Tengo cosas allí de cuando estaba más delgada y no p
necesito camb
ía sentir su piel erizada al contacto con el agua fría de la regadera. Se enjabonó para salir rápido de la ducha. Tomó la toalla y fue h
er blanco con rayas negras y un vestido de poliester,
quedaba bien, le gustaban las rayas. Luego se probó el vestido, parecia hecho a su medida
tendría el camino despejado para ir hasta aquella misteriosa casa. El lugar le provocaba cierta c