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Historia

Capítulo 2 2

Palabras:3120    |    Actualizado en: 15/01/2023

e mi cuerpo para su Bel placer, finalmente se baja si dentro de mí, levantánd

tienes que hacer

regunto mientras se viste, pasándose la c

. - habla de una manera que envía una extr

eghan. - Sonrí

s...- esbozo una

tu fin. Me encojo de ho

tóba

nombre en

.

puesta. Sigo de pie detrás de la silla, mirando toda la abundancia, y au

do de la silla, levantando la mirada h

er día aquí y las primeras impresiones son las que cuentan, y ese pensamient

el hombre

lliam. Tu tío tamb

de que esté haciendo daño

tu hermana es lista, estará bien

ada de lujuria en los ojos. La deseaba con todas sus fuerzas, sólo que no lo conozco y no sé cuánto la necesitaba para satisfacer ese deseo, tal vez sólo una noche.

eña mesa redonda, llegando hasta la punta de mi barbilla, que aprieta antes de acariciarme ligeramente la mejilla, lo que me produce cierto dol

un mensaje y pregun

nada. Deberías dejarlo ir. La gente muere ráp

no tengo noticias suyas. Dije que te serví bien.

r parecías muy p

importa. No puedo dejarla ir, las cosas no funcion

la nada. Y no habría necesidad del ser repugnante que es en el mundo. Pero no se lo diré a Cristóbal, aún no. Haré de niña buena. - Sólo que no es la mejor persona del mundo... nunca se

si tu hermana está viva. ¿Eres una hermana ma

tres

ntos año

o de cumplir v

mano por la cara, apreciando la s

me gustaría. - Aprovecho el momento para mostrar vulnerabilidad con

se entr

¿C

ión, nuestra primera conversación... no me gusta mostrar mis traumas y debilidades. - Bajo la mirada,

con convicción - Treinta. - responde a

er exactamente? -

ero saberlo t

éis... tengo una hermana. Somos hermanastras,

e están t

n en cuanto mi madre les contó lo del embarazo. Mi madre era una gran mujer al involucrarse con hombres que no valían na

y dice que sí a mi opinión.

rió nuestra madre... lo único que teníamos que

qué

borracha... esperábamos que algún día le causara prob

lo. - levanta t

Tania y de todo lo que nos hizo, no me sentí ni me siento feliz por su muerte. Su muerte prematura me parece tan triste y

.. Así que

la cabeza en un intento de entristecer la situación. -

una de las preguntas con la misma res

asado? ¿Llegast

No puedes salir de esta casa, y si lo haces, morirás al primer paso que des. Siéntete libre de hacer lo que quieras aquí. - Me levanta la

echo al oír esto, como si se hubiera aflojado una

as por

- Vuelve a besarme los labios antes de soltar

ant

pero a que caiga cada gota, mi atención se dirige al reloj de pared de la cocina

puerta del salón que se abre y se cierra bruscamente

eza para comprobar si está bien, si no está herida o algo. Veo

gujero. - dice, respi

é ha

le devolví la bofetada. Fred se enfadó y me dij

el vaso de agua que tenía en la mano. - Bébetelo. Se lleva el vaso a la boca t

o más esta

ro y a nosotros mismos que no moriríamos en esta miseria como nuestra madre... cuando por fin estaba ce

, mirándome con los ojos inundados de las lágrimas que le corren

lo que n

re lágrimas. -Quiero que cualquier hombre asqueroso como el de hoy tenga miedo inc

iro con compasión. - Necesitamos a alguien con

o de esperar.

zo, tratando de consolarla. - Podrás conseguir un trabajo

este tío Julián llama nuestra atención, haciéndose más fuerte a medida qu

Me vuelvo bruscamente

cuando se detiene frente al sofá donde estamos. - Me alegro

opina, r

e has vuelto loco? ¿Cómo vamos a v

ipo me

tu estúpido trabajo. - La tiras del brazo, sacudes su cuerpo. Lo que hace q

la forma de hacerlo por nuestra cuenta, vamos a meterte en

l dinero de ese asquero

negocio está comprometi

- pregunta Alice, sonrie

de la que pu

erra en las calles es culpa suya -se d

ar con este miserable...- hablo en voz b

or

de mí si haces

como un mantra, como una motivación. La primera gran cosa qu

ansablemente durante horas para llegar a casa y él se c

dos a

e aquí. Hace dos meses que conseguí un trabajo en el mercado más cercano a mi casa, un trabajo que me da un día libre a la semana y ocho horas al día. Todo esto para

des, Ferrari, Jaguar. Nunca más tendré que ponerme una maldita joya en el cuello, la muñeca o los dedos. Lo único que brillará en mi cuerpo serán esmeraldas, zafiros, diamantes y rubíes, todo lo que brille tanto com

compraré en Nueva York y Milán, tendré un armario enorme lleno de ropa que ni en la vi

a aquí, es la razón por la que sigo existiendo. Necesi

s ponert

ente a la cajera que mira impaciente sus com

.

en el pie de estar de pie durante horas. No veo a Alice por aquí, pero oigo un ruido en la cocina que me hace caminar

ro para ir de compras. ¡No

, dando u

cipios de mes y ya estamos a finales, sólo cobraré a

ar en otro momento. Es que

ellas, aunque no estuviera comprometido con el tráfico hasta el cuello, no metería ni un grano en casa. A Julian le encanta echarnos en cara a Alice y a mí que viv

astin

vía tengo que pagar las fact

etas de mierda en ropa, zapatos y m

enarme un vaso de agua, y

llamará la atención del hombre que nos sacará de esta vida. Y para mantener toda esta apariencia hay que gastar, con ropa, salón de belleza, maquillaje, zapatos, bolsos,

s privadas son n

í, atraerías a más clientes y eso nos sacaría de esta miseria. Pero sois idiotas y preferís mantener la virginidad...- lanza las palabras con desprecio y es suficiente para que l

e forma amenazadora, levantando la

es, mi cara cerca de la suya mientras mi mirada arde de furia contra la suya. - Si vuelves a abrir la

as y da un

gió de hombros. - Date la vuelta y asegúrate de llenar pronto esta nevera. No soy e

ldito, mil v

ra.

disfrazarme de sueño. Así te echarás a mis pies y harás todo lo que yo desee y,

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