ra

paso un ejercicio de agonía. Mi cuerpo era un desastre, pero el dolor era un zumbid

mento de facturación. Tenía

el largo y estéril pas

estaba solo. Sostenía un vaso de jugo con un popote para Chantal, quien se

ono mientras su hijo moría, estaba haciendo de enfermer

y se movió para proteger a Chantal, co

aja y cautelosa-. ¿Qué

rás de él, sus ojos abie

aba tan preocupada. Le dije a Ethan que fuera a ve

e él, una imagen de per

Ethan era dur

ner una charla muy seria. Le debes a Chantal una gran disculpa. Y vas

eño, cubriendo un trozo de piel que probablemente estaba ligeramente

ador. El vacío devastador dentro

eas y un dolor tan poderoso que cas

cara y decirle lo que había hecho, lo que habíamos perdido. Q

to? No me creería. Ya

quedaba aquí un segundo más, me quebr

er. Forcé mis labios en una imitaci

quietantemente tranquila-. No

do por mi sumisión. Clara

ve a tu habitación y espérame. Estaré allí después d

éra

on en los espacios v

casa para la cena. Nunca ap

próxima semana, lo prometo. Canceló e

oportunidades para demostrar qu

finalmente había decidido dejar de esperar. Cuando se arro

Ethan interrumpió mis pensami

hantal, su atención cambiando

el brazo? Deja que

e nuevo. Frente a m

que el cielo es azul y el sol sale por el este

bien -

e mi rendición. No a

Ni en esa habitac

a espalda recta, mis pasos lentos

ras entregaba mi tarjeta de crédito personal -una que él no sabía que tenía-,

trador, su rostro arrugado por la preocupación-. Acaba de t

bien

ra, me mostraba más preocupación que mi propio esp

. No lloré. Solo miraba el techo, sintiendo cómo la vida que hab

no. Nunc

, trayéndole jugo, escuchando sus interminables quejas sobre su "terrible herida".

siquiera despertaba i