vista de
la clínica de urgencias, su voz amable-. Es un
ección que Damián me había dejado, aunq
sita de nada, apenas un rasguño, pero él había actuado como si me hubieran herido de muerte. Lo había limpiado con una toallita antisép
nca había existido. Se acabó. Eso, po
vibró con un
ien tu mano? Le he pedido a mi secretaria que se encar
upación. Ya ni siquiera se m
en. No neces
casa. El silencio en el interior era una presencia física, presionándome por todos
Eran casi las 3 de la mañana. Se movió por la sala a oscuras, su silueta recortada por la luz de la l
eron. Se acercó y se arrodilló a mi lado, su
el sueño y el alcohol. Se inclinó
or agudo y punzante subiendo por
surré, la palabr
enumbra, pude ver un destello de sorpresa en sus ojos, como si
ose una mano por su cabello perfectamente peinado-. Ha sido una n
uavizándose en la sinceridad
í, ¿verdad? Siempre serás la se
a cruel y patética. Yo era la esposa que mantenía escondida e
cio como aceptación. S
dio esta noche. No
dome sola con el dolor punzante e
más analgésicos. Al pasar por el estudio, escuché el murmullo bajo de su voz. Estaba al
ra, sin rastros de sueño ni alcohol-. Harrison tiene el original. Podemos anuncia
a persona al otro lado, probableme
nota de satisfacción engreída en su tono-. Siempre ha sido... emocional. Pero creo
endo considerada. No tenía idea de
solía usar solo conmigo-. Todo va según lo planeado. La salida a bolsa es en un m
sta de matrimonio. La que
us siguientes palabras fueron más frías, más agu
los años que pasé con ella, luchando por salir de la pobreza... eso no era una vida.
al escapó de mi garganta, algo entre un sollozo y un grito. Me tapé la
pesa
... todo era solo una pesadilla vergonzo
en mi mano no era nada. Un dolor sordo y distante. La verdadera herida
uerta, mi visión se nublaba. Una risa, agud
esadilla. Y yo, finalm
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