lani. Dejó el tazón en la mesita de noche y,
amable me provoc
r y le señalé el lugar
donde le había indicado. "¿E
so duele!
otras partes de mi cabeza y preguntó: "
ba dist
oncierto. "Qué extraño. Últimamente he sentido un pin
r un dolor neuropático. A mí también me
angre donde me había tocado, pero ella insistía en que no era nada. Proba
s llevaba un tiempo despertando con esa misma punzada. N
mo si lo meditara,
por favor, tómese su medicina. Iré a ver a Niko.
justo lo que yo quería. De lo contrario, se habría q
te, me sentía más despejada y menos somnolienta. El agotamiento habí
do ese medicamento. Sospechaba que era
a analizar cuanto antes. ¿Qué e
ar si Clayton estaba
eshacerme de este
tinto me decía que debía ser cautelosa. No estaba segura de las intenciones de Kalani
medicina. Derramarla sobre la manta una y otra vez no
idea cruzó mi mente. Mientras sostenía a Tabby, noté su evidente rechazo hacia el tazón.
y, a propósito, me sacudí la ropa
una toalla en la mano. Me aseguré de darle la espalda a la cámara y vertí
uar con la mayor naturalidad posible. Después de enjuagar la toalla, b
el corazón me latía desbocado. Jamás imaginé encont
ció oír la voz de Clayton. Sobresaltad
rsona más importante para mí en esa casa. Durante la última década, me había
to del maltrato que sufrí mientra
en la planta baja, junto a la r
un vistazo, lo que vi me dejó sin aliento. Me