música al romperse hizo eco
pareció
do en el suelo. La pequeña bailarina ya no estaba.ntentaba recoger los pedazos. Eran demasiado pequeñ
llevándose una mano a la boca con fi
n mi interior. Me abalancé sobre ella, ap
ate!",
lfombra y cayó dramáticamente al suelo. "¡Aah! ¡Me
cidad de un rayo. Al verla e
cabeza hacia atrás. "Maldita pe
criadas que barriera
aron con fuerza. Miré, sin poder hacer nada, mientras barrían el últim
encé a buscar entre los desperdicios, ignorando los restos
y duro. Al sacarlo, vi que era e
puerta. "Revolviendo en la basura como el anima
el vaso. El último hilo de
de su garganta. "No te atrevas a hablar de mis padre
ojos abiertos con verdade
o y Elliot llegó en un ins
adoramente calmado: "Has ido demasiado lej
ardaespaldas y ordenó: "Lléve
n reciente suya, un pequeño cuarto insonorizado en el sótano que había construido para 'curar' mi rebeldía. En me
scalones de concreto mientras luchaba y gr
cuero frío heló mi piel. El o
áscara fría y dura. Katarina se asomó por detrás de é
con Katari
s", e
al guardia del panel de control
n y mis dientes se cerraron tan fuerte que creí que se quebrarían. El dolor a
bía comenzado. Me desplomé contra las cor
e", repiti
po temblando. Lo miré a los oj
ó a hace
desgarrando. A través de la bruma del dolor, vi destellos de una vida diferente. Ell
dos eran una br
cidad se detuvo yo est
ente", dijo Elliott con un to
y ordenó: "Llévenla a su habitació
aba completamente inerte. Me arrastraron escaleras arr
ada centímetro de mi cuerpo adolorido, y lloré. No a causa del dolor físico, sino p