lo una vez antes de
eja
ctamente como la recordaba. Tenía una
evitar que su propia voz temb
volvió a hablar, su voz había perd
ue me dijiste que no te contactara nunc
era justa.
r. No podía explicar los años de esperanza y las
ad. Podía oír el leve sonido del tráfico en su lad
s? -preguntó
una oferta de ayuda
ospital
minutos -dijo, sin un á
mareó. Pero entonces, un destello de su antigu
o... tengo algunas cosas que hace
peligrosa y absolutamente inflexible-. E
ea se
errumpido una negociación multimillonaria a media frase para atender su llamada. Arrojó el t
r
consejo médico, los papeles del alta un testimonio de su silenciosa rebelión. El dolor en s
ña oficina privada en el
r el divorcio -le dijo a la empleada, su
con ojos cansados, tecleó su nombre en el s
andra
Carlos
-Señorita, no hay ningún matr
o es posible. Nos casamos en el Tem
de una lástima que hizo que la piel de Alejandra se erizara-. Per
sí lo está. -Giró ligeramente su monitor-. Carlos Sandoval está
nombre en
tal Camil
hasta que no pudo respirar. No era un matrimonio falso. Era uno inexistente. Toda su vida durante los últimos seis meses, la humillac
d -el tráfico, las sirenas, el parloteo de la gente- se desvanecieron en un rugido sordo
en su bolsillo. Un
iento mucho nuestra pelea. Ya voy
l venía a "casa". A su casa falsa, d
ensaje
uestra primera cita? Pasaré a comprar algo.
mesas- fue una nueva puñalada de dolor. Sintió una sensación desgarradora en
una última vez.
a intentado crear una escena de felicidad doméstica. Había velas encendidas. Su música de jazz favori
voz suave con alivio. Se acercó pa
ana de una bailarina. -Te traje algo. Para decir q
himenea donde solía estar su compañera. El espacio estaba vacío
-preguntó,
amila se sintió muy mal por eso. Es que es
nos. Las de él estaban cálid
mos que ser pacientes con ella. Ha pasad
a esposa*, g
ella era tan inmenso que se había convertido en una extraña y
rtando sus manos-. Creo q
os la observó, un destello de inquietud en sus ojos. Se
x, e
egalo que ella todavía llevaba en su bolso
deslizó, aterrizando boca a
a agarrarla, pero
pequeña imagen en blanco y negro, con el ceño fru