raran al sótano. Era una cava de vinos húmeda y oscura, el aire espeso co
icho, su voz desprovista de cualquier emoción antes de ce
e dolía el cuerpo y un cólico sordo comenzó en la parte baja de su vientre. Era miedo, se dijo a
taba allí, con el rostro impasible. "El señor Herrera dijo
discutir. Se puso la ropa sencilla que la sirvienta le había traído y sal
o. Este bebé... no podía traer un niño a esta pesadilla. Era u
nas temblando. La enfermera de l
o, necesitamos la firma de un cónyuge o un
estaba a horas de distancia. No tenía otra opción. Su
mbre. "¿Qué quieres, A
lyn. "Jacobo, ¿quién es? ¿Es ella? Dile
Jacobo era dulce como la miel para Evelyn, luego se
l, su voz quebrándose. "Necesito que vengas.
Estás tratando de hacerte una cirugía plástica para arreglar esa
qué tipo de procedimi
, por f
e. Evelyn no s
lg
la invadió. Recordó una vez que tuvo un poco de fiebre, y él había traído a un especialista desde otro estado. Le hab
uién era este extraño frío y
a e inquebrantable, finalmente se agrió hasta convert
lan en ruinas. Tendría que encontrar otra maner
la puerta del pasajero para Evelyn. Evelyn se veía pálida y delicada, apoyándose
os. "Vaya, miren quién está aquí. ¿Siguiéndonos,
ntentó pasar junto a ello
idad. Evelyn tuvo otro de sus episodios. El doctor dijo
cos y fríos. "Ambos tienen el mismo tip
endo instintivamente a su estómago
ortarse las venas de nuevo esta mañana por lo q
s palabras una súplica desesperada y de
rio. Un sonido áspero y feo. "¿Embarazada? No seas ridícul
no emitió ningún sonido. Se quedó allí, c
agarre le dejó un more
stas. La empujó a una pequeña habitación, forzándola a
bel, mirando a Jacobo. "
ntana, con la mandíbula apretada. "Sáq
u sangre, la misma fuerza vital que necesitaba para su bebé, era extr
ió de la habitación. Lo vio caminar por el pasillo, con el brazo alrede