montaña limpiara los últimos vestigios de su antigua vida, el lugar estaba exactamente como lo recordaba: una p
te tirado en el césped, un triciclo rojo, le llamó la atención, momentos después, un niño pequeño, d
an rápido!", le gritó
menudo hablaba de su sobrino, Samuel, el hijo de su herman
o las voces llegaban claras en el aire quieto de la montaña, la
sto, la pobre madre de Marcos no ha estado bien, pero te digo un secreto, a veces creo que Marcos exagera un poco sus crisis
bra era un golpe, un martillo que dest
racticar con él es bueno, ya que su propio esposo, un científico aburrido, nunca quiso tener hijos, Clara siempre qu
ientífico aburrido" que se interponía en el camino de la vida perfecta que Clara estaba construyendo con otro hombre, la humillaci
altaba, corrió hacia su auto, sin importarle la maleta, la cabaña o los
co, que sentía como si su pecho fuera a estallar, finalmente, se detuvo en el arcén
ara, su nombre en la pan
su tono era ligero, despreocupado, "¿Estás
y la indiferencia de ella fu
usurro roto pero lleno de una finalidad abs
ora teñida de pánico y confusión, "¿De qué hablas? ¿Es
plotando, "¡Lo sé todo! ¡Sé sobre tus planes, sobre cómo
ás siendo dramático!", replicó ella
era ahora fría como el hielo, "Cuando vuelva a la ciudad,
oz se volvió aguda por la desesperación y la pose
uchó una voz masculina de fondo e
na? Me duele la cabeza de repente", dijo M
completo, la farsa había terminado, el dolor seguía ahí, pero deba