tierra mojada me advirtió d
rantes de un coche acercándose, y el cla
otra vez, el instante exacto a
uria, mientras Sofía, mi mejor amiga y testigo d
o era por el inminente impacto; era po
revelaba que yo era solo un "escalón" para Ricardo,
l, un estruendo de me
en, vi a Ricardo ignorarme, lanzándose hacia Sofía, jurá
por su desesperada actuación, me señalaron como la culpab
lor punzante en mi vientre y una humedad cálida ent
a mi mejor amiga; perdía a mi be
esprecio de Ricardo
que estoy perdiendo al beb
ena. Siempre tan dramática. Busc
mi propia madre me dio la espalda, c
mi cabeza, mientras sus palabras heladas resonaban
nada por todos, la Ximena
, nació una nueva resolución: si no m
caría la verdad que ell