te que lo había sacado de las pistas de carreras, su andar arrogante ahora reemplazado por un cojeo que lo enfurecía, a pesar de su
, sus manos me apartaron con una gentileza est
o, sentándose con cuidado en el sof
presentimiento que se instal
? ¿Te sientes mal? ¿
abeza, su expres
sobre nosotros,
silencio de la sala, siempre era Mariana, el fantas
or, acabas de lleg
éplica, "sé que no he sido justo contigo, sé que ella siemp
n desafío? ¿Qué clase de
te, "sin preguntas, sin dramas, simplemente te vas y me dejas en paz para siempre, pero si no llego
retorcida de pedirme permiso para seguir siendo un infiel, pero estaba tan desesperada por su a
a palabra se sintió co
mi destino, él lo firmó con una floritura, como si fuera un contrato millonari
pre involucraban a Mariana, cada vez, él volvía con flores y promesas vacías, y yo, como una tonta, lo perdon
a golpeaba las ventanas con furia, yo estaba acurrucada en el sofá, con un cóli
cardo sonó, era e
preocupación falsa llenó sus
ente? ¿Estás bien
buscando las llaves del
ente en la carretera, t
vientre se intensificó con la angustia, "está lloviend
Ximena!" , me cortó, su voz era
mo si yo fuera un estorb
con un hilo de voz, las lág
una sonrisa casi impercepti
a detrás de sí, dejándome sola con el ruido
e alejarse, el dolor físico y el emocional se fundieron en una ago
, me puse un impermeable sobre el pijama y salí a la calle, la lluvia helada me empapó al instante
a mis lágrimas, hasta que mis pies, casi por instinto, me llevar
mente desde el interior, toqué el timbre, sintiendo
solo rasguño, llevaba un vestido de seda rojo que se ceñía a su cuerpo y
a" , dijo, su voz goteaba veneno, "¿buscas
sentado en el sofá de ella, riendo, sin rastro d
nza se extinguió, caí de rodillas en el umbral de su puerta
o de mi humillación, pero algo dentro de mí se rompió
el dorso de la mano y la miré a los ojos, ya no
e había preparado desde la octava vez, un acuerdo d
sonaba extrañamente calmada,
ensanchó, le guiñó un ojo a Ricardo, q
resa" , le dijo con dulzura empalagosa,
ana, tomó el bolígrafo que ella le ofrecía y firmó
toria, firmó mi liberación,