as, tejiendo una red de seguridad a mi alrededor que yo nunca supe que existía. Su nombre, que yo creía olvid
o tu carrera con cierto interés. Tienes una cara bonita, pero car
Y usted quién se cree que es para hablarme
imera gran oportunidad, ¿no lo recuerdas? Un pequeño favor que le hice a un amigo fot
puso. El reconocimiento y el p
sido una esnob insegura, desesperada por mantener las apariencias. Casar a su hijo con
lló la madre de Ricard
or en jefe de 'Vogue Paris', el presidente del conglomerado LVMH, el director del Met. Todos están muy interesados en
ó fue más pesado que
ulación de Valeria para romper un compromiso, la conspiración de una madre para despojar a una j
ermodelo Valeria, una ladrona de diseños y de vidas'. Tus
dalo social sería insoportable. Serían la comidilla y el ha
dose en una lápida cercana para no caer
quiere?", s
e 'El Sueño'. Se emitirá una disculpa pública, citando un 'terrible malentendido'. Valeria, renunciarás a cualquier reclamación sobre la empresa y l
ritó la madr
al", respondió mi abuela sin in
a levantarme del suelo frío y me abrazó. "Lo siento, mi niña. Debí haber inte
oleada de alivio y poder comenzaba a
una asistente humillada, sino como la dueña indiscutible. Valeria y la madre de Ricardo estaban allí, con abogados d
o con una expresión de miseria y arrepentimiento. Cuando todo ter
to tanto. Fui un idiota, un cobarde. Dejé que
mbre por el que habría dado mi vida. Y por primera vez, no se
ue fuiste manipulable. No tenías la fuerza para defender nuestro amor, ni la integridad pa
portunidad", suplicó, i
darme como asistente a la mujer que elegiste por encima de mí. Me v
te mía. Lo dejé parado en medio del taller, solo, rodeado por los fantas
, respiré hondo. El aire ya no olía a traición, sino a un nuevo comienzo. E