ilencio por un momento, un s
si me hubiera vuel
de Don Eladio?", preguntó, con un tono
de proyectar una autoridad que no sentía. "Soy Sofía Reye
vecinos que se habían asomado a l
us ojos curioso
chamaca ya no sabe ni qué inventar para salvarse, ¿creen que la nieta d
el, pero para ell
creciendo en mi garganta. "¡Me drogaron! ¡M
as pero de mirada dura. "La muchacha que te trajo, Isabella, nos dijo
unda de lo que imaginaba, había pensado en
ero este sigue siendo su pueblo, su gente", intenté explicar, desesperada por hacerles ent
el aire, chocaban contra un mu
ña, una mentirosa, una merca
entos", dijo Ramona,
na fuerza brutal, sus uña
y si vuelves a decir que eres una Re
eza golpeó contra la pared de ad
evolvió a la realid
n, y no me
un grito desgarrador que salió
S! ¡LA NIETA DE ELADIO!
de que alguien, cualquiera, me e
patio, y por un instante,
inquietos. El nombre de mi abuelo
esperanza fue aho
boca con su mano sucia, su al
callaras, maldi
estómago con e
en un silbido doloroso y caí de rodil
dolor era insoportable y el m
da y nadie iba a
conjuro mágico, esperando que me protegiera, pero
erta de madera se cerró con un sonido final y d