sin rostro, se acercaron. No dijeron una palabra. El primero me agarró por l
os. Cada golpe, preciso y bru
un fuego líquido en mis entrañas. Con el tercero, sentí alg
mbros y la guio hacia el ascensor del edificio. Antes de que las puertas se cerraran, ell
scuridad y
arco tibio y pegajoso comenzó a extenderse bajo mi cuerpo
el forcejeo, empezó a sonar. Era la melodía que le había pues
e estás? No c
que pude decir antes de que la o
aterrorizada de Emily sobre mí. Me encontró siguiendo la ubicación de mi teléfono. Me
a de la sala de emergencias. El médico, un h
ragia interna grave. Hemos tenido que interven
ebé. Mi se
emocional. Cada instrumento, cada palabra del personal médico, era un reco
a, tomó mi teléfono y llamó
ruo!" gritó. "¡Luciana está en e
a voz de Máximo, teñida
ana que se busque un truco mejor par
agua, escuché una risa f
dijo la voz de la amante.
olo podía mirar el techo blanco, sintiendo un frío que nada podría calmar. No era
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