a de un pueblo costero de Oax
Montenegro, su vida era un lujo
opulencia se rasgó con un a
e su amante Sofía, ató a mis padres en la
paradero de Sofía, o el
al, se convirtió en la mordaz
r, cómo sus hombres empujaban las
mi garganta, mientras el m
s. Por mi culpa, r
me consumía, un fuego invisible que
r mi carcelero, mi torturador, culpándom
esa agonía silenciosa,
sombrío propó
n cuaderno escribí una nota firme: "Necesito