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Historia

Capítulo 3 La boda

Palabras:1037    |    Actualizado en: 14/06/2025

o los golpes en la puerta retumbaron en la habitación de Vanessa

dora ha llegado -dijo un

frunció

ladora?

rillantes y maletines llenos de brochas, polvos y per

pasando? -pregunto c

taba pálido, y sus ojos, normalmente imperturbables, brillaban con una m

se hara hoy. Tu padre la planeó para esta

ró. Las palabras tardaron en asentarse, no entendía como

? ¡No voy a casar

aso más cerca y bajó la voz para

e ayudaré. Tengo todo listo. Avísame, y desap

de abrazarlo, de llorar en sus brazos, la idea cruzó por su cabeza...

ero no voy a huir. A

er la siguiente jefa, aunque eso hacia palpitar su corazón, se trataba de tomar las decisiones y que nadie mas tuviera el control de su vida, si

a, la cual su padre mato frente a sus ojo

ecuencias, y lo pagaran l

re de un metro cincuenta con canas y cuerpo delgado, el mism

-dijo con tono seco, mientras mirab

n la voz cargada de veneno,

sobre mi vida? ¿Me vendiste a ese hombre? -

y salieron de la habitación. Henry s

. Todo lo que hago es por ti. Quiero que tengas una vida normal, una vida

poder de la mafia, quiero ser tu heredera, soy tu única hija! Siempre me dijiste que

or un segundo. Solo uno.

rotegerte cuando yo ya no esté. Esto no es una democracia, Va

Esto se trata de contr

sada -Quiero que mi única hija sea feliz, no que se encuent

el ambiente

jeto por sus br

te permití vivir

no perdonaría a su padre por esto. No vengo la muerte de su madre y ahora permitía que otro h

ia fue al

ncas, velas flotantes, música de cuerdas. Era como un cuento de hadas para una princesa. No sabía cuán

a, el frío acero de su alma se resquebrajó. Nunca había visto una mujer tan hermosa. Tan trágicamente perfecta. Por un momento, se sintió al borde del llanto. Era como si la perdiera incluso an

de los invitados, un juicio silencioso. El vestido pesaba como si tuviera grilletes

el aire se volvió espeso, haciendo que no pudiera llegar con suficiente fuerza a sus pulmones. Tenía ganas

ablar, Vanessa repitió una promesa en

uno. Y cuando llegue tu turno, Dam

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