img Un Papa en Apuros ¿En Busca de una Niñera?  /  Capítulo 4 4. | 80.00%
Instalar App
Historia

Capítulo 4 4.

Palabras:1783    |    Actualizado en: 27/05/2025

E

a hacia el reloj en la mesita de noche. Pasaban ya de las ocho de la mañana. Solté un suspiro y me puse de pie rápidamente. Me acerqué a la ventana, corrí la persiana y

la limpieza?", pensé encogiéndome de hombr

ensación hasta terminar. Me enjaboné rápidamente, me cepillé los dientes y, tras salir de la ducha, me rasuré frente al espejo. Me detuve un momento a observar mi

llevaría a mis hijos de paseo. Entre semana pasaban demasiado tiempo encerrados entre la escuela y la casa, y necesitaban salir y dist

orazón", lo que me sacó una sonrisa. Mi hija adoraba hacer esto los fines de semana: encender la televisión con música tranquila

e a mí con una gran sonrisa. Apenas con diez años era inteligente

ernura mientras ella me da

i está listo el desay

nterés. Pero algo preocupado, a veces me daba pánico que hiciera

mucha cebolla, como a ti te gusta. Y

compl

, ¿por qué te levan

ndo no viene Ana o la señora que hace la limpieza -respon

na hoy? -pregun

a-. Por eso le pedí a

té un

daste a

ió con sat

cía nada, no iba a poder

e evit

niña muy i

ia hora. Escuché el timbre cuando estaba en la otra calle. Así que le toca h

su cabello rubio, el cual tenía atado con dos

a descansar -respondi

acias -dije, dejándome

patio. Solté un suspiro y me acomodé en la mesa. Desde ahí, podía verla conversando c

os o no vas a de

mpias -respondió

Ve y lávalas b

una m

uegas Minecraft

me dejas jugar después de

omes y después cump

l pensar en su madre. Sabía que necesitaban el calor de una madre, pero, lastimosamente, mi esposa había fallecido cuando ellos tenían solo t

ntía un vacío, un espacio que solo su madre podría haber llenado. Pero ahí estaban ellos, mis pequeño

sto! -me llamó mi hija, sac

cariño, ya est

*

ientras esperábamos, mi hija comenzó a enseñarme algunas cosas que yo no sabía. Me sorprendió lo mucho que había aprendido con

mesa con ellos una vez que terminamos nuestras tareas. Ya pasaban de la una de la tarde y habíamos pedido pollo con

r una vuelta por las isletas, ¿le

egría, mientras que J

mos que salir? -pre

o pegado a ese móvil, hijo. Vamos a sa

ya está bien.

pá? Quiero grabar videos de

ro,

voy a

a dónde? -pregunté,

para música y para poner versículos bíblicos. M

ste esa cuenta? -pregunté, ya sint

-respondió mi hi

permiso? Tienen que consult

a malo... -inten

lo hiciste

cuenta

ien, hija. No

pá, solo quería hacer

? -pregunté

alabanzas. Yo misma

evo para mí... ¿

usta much

evemente

harás cosas sin consultarme primero. Eso es

papá. No lo v

gue el pollo, almorzamos y luego a las

había permanecido callado,

, Laura, irá

con la

ella

encogiéndose de hombr

e. Le escribí diciéndole que mañana saldríamos un rato, ya que hoy no podría. Ella

s acomodamos en la mesa. Mis hijos se lavaron las manos, abrimos una gaseosa y servimos e

hucherías, algo que no suelo hacer, pero esta vez haría una excepción por ellos. Subimos al au

odía y ella comenzó a grabar con su móvil. Jader, en cambio, estaba concentrado en s

e apreciaban la belleza del paisaje. Desde allí, se podían ver los volcanes y las pequeñas islas disper

ar a mi amada esposa. La última vez que estuvimos aquí, ella estaba embarazada y no dejaba de admirar el paisaje de nuestro país. Era aterrador pensar

lado en mis peores momentos, tratando de apoyarme. Me gusta su compañía; es una mujer atenta y hermosa, pero aún no le he entregado comp

se rol. Suspiré profundamente, apartando esos pensamientos de mi mente. Hoy no quería pensar en el pasad

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY