Una Babysitter para el CEO obstinado

empresa prestigiosa a cargo que le generaba montos de seis cifras semanales en su cuenta bancaria y la alegría, de q

guntó a su esposa Jane, su

ella, acostada en la camil

pocas horas tú, nuestro pequeño Oliver y

evemente, mientras él bes

o mie

cupes, yo e

camilla hacia dentro de la sala fría del quirófano. Ethan entró j

icada cirugía como aquella. En tanto, Jane aunque no podía ver el procedimiento quirúrgico, se notaba algo ansiosa. Sostenía la mano d

as el llanto del recién nacido al ser recibido en el mundo exte

có al médico y le preguntó en voz b

curre,

ervaba en silencio, lo que tanto había temido,

especial, tiene síndrome de Down

so no puede ser -m

sa, mientras intentaba apoyarse en sus codos e inc

, aún la cirug

ra para que lo llevara hasta el área neonatal mi

ro lugar. Mil pensamientos viajaban por su mente, tratando de

hijo había n

podían prever algún tipo de condición especial, su insistencia en que no

sabía que

tro de Jane, una lágrima de insatisfacción propia, de miedo a ser abandonada por él, de te

z del médico y el sonido de las pinzas sobre la mesa

tijera cortó el hilo de nylo

jos cayendo en u

nacidos, se necesitan algunos datos personales suyos y de su esposa. -El

ted sabía de

alizarse la prueba de translucencia nucal en el primer trimestre, la cual hubiese

asombro y habló

biese permitido que interrumpiera el embarazo. ¡Se trata de la vida de un ser humano! -exclamó i

del embarazo, la tienen los padres, no los médicos. -contestó el galeno ante la acusación del

te de desechos y salió de la sala de cirugía. Sentía la sangre hirviendo dentro de sus venas, la rabia y la impotencia se apoderaron de él; no era la condición genét

iba cabizbajo. Levantó la vista y vio el identificador en la pared que indicaba el pasillo que debía tomar. Justo e

-dijo él con severidad su

tre sollozos mientras levantaba el r

y la chica continuó caminan

pequeños que dormían alineados en sus cunas transpare

dos. Era tan pequeño y tan frágil. En su pequeño rostro podían verse con claridad los rasgos inco

sintiendo la presencia de su padre. Ethan contuvo el aliento y un gemido suave escapó de sus labios, refle

estaba esperando. -dijo y una sonrisa se dibujó en su rostro