tulo
oré y llamé a las sirvientas para que prepararan el baño. Mientras el vapor llenaba la habitación, seleccioné
mis músculos y despejara mi mente. Al salir, las sirvientas me ayudaron a vestirme
rtaletas de champiñones con trufa como aperitivo, seguidas de un suculento pollo al curry acompañado de arro
mano a la boca-. Esto es increíble; n
e a mí, y no pude evitar sonreír an
antes de sumergirme en lo
te en la silla, sintiendo la agra
os momentos de contemplación, me dirigí a una de las
on una mezcla de s
toy segura de cuáles so
laves se acercó, con una ex
ue requieren su firma, relacionados
ando de ocultar
da. Solo sé que ella heredó las empresas, aunque es
n se ha hecho cargo de todo? -pregunt
cia, su mayordomo asum
puerta, giránd
está é
mo unos días antes de que usted despertar
mí? -inquirí, intentando desentr
asintió con
r amigo de su padre y
n caos de papeles y libros apilados, to
erdo muy
, solo que fue amiga de Elizabet
critorio, observando el
.. ha recibido
roporcionado to
punzada de culpa por no
iré a vi
ajones para familiarizarme con su conteni
a estado cerrado; na
lave? -pregun
o y, con manos temblorosas, sacó
esto y que se lo entregara cuando despertara. Nu
tiendo su frío met
do el pequeño objeto que podría des