/0/8605/coverbig.jpg?v=42af51962631c40ceafb9a4c566fd565)
Pamela tendrá que tomar una difícil decisión tras el regreso del amor de su vida y padre de su hijo lyan. Él la abandonó cuando supo que serían padres han pasado 6 años y él regresa para recuperar a su familia, siendo el arrogante y mal chico que siempre ha sido, sus padres le dieron todo menos buenos valores, Kyle no sabrá lo que es el dolor y sentirse perdido, hasta cuándo tras conocer y compartir con su hijo, empieza a quererlo, no la tendrá fácil. A pesar de aún amarlo, Pamela no le perdona haber perdido todo, especialmente a su familia por la decisión de tener a su hijo sola, Kyle es un futbolista famoso quien decide luchar por el perdón y amor de Pamela y su hijo, se da cuenta sentido el daño que causó cuando es demasiado tarde para él, pero la vida suele dar segundas oportunidades.
«¡Quién puede ser!», me pregunté mentalmente y un poco preocupada por el modo en que llamaban a la puerta.
"! Caray!, ¿por qué llamarán a la puerta con tanta prisa? Espero que sea por algo realmente importante.
-¡KYLE! -exclamé asombrada, al tiempo que intenté cerrar la puerta, al reconocer al hombre parado frente a mí.
Al abrir con tanta tranquilidad lo último que me hubiera imaginado, hubiera sido ver allí parado a Kyle, el idiota hijo de papi y mami, con una sonrisa perfecta, ojos celestes, cuerpo atlético, esas malditas facciones faciales que lo hacían lucir más guapo que años atrás.
Fruncí el ceño, lo reconocí por su sonrisa, debía reconocer que por más que lo odiara no podía negarlo, los años le habían sentado de maravilla, como era posible que alguien tan canalla pudiera ser tan guapo.
-¿Qué crees que haces aquí? Te dije que no te permitiría ver a mi hijo. Te lo mandé a decir y te lo repito ahora -solté con molestia.
-¿Tu hijo? -preguntó, con una sonrisa sarcástica-. Te recuerdo que también es mi hijo y tengo todo el derecho de verlo.
-No seas hipócrita, por favor. ¿Ahora quieres verlo? -pregunté airada, cerré y salí-. ¿Quieres que te recuerde lo que hiciste cuando te dije que estaba embarazada? ¿Quieres que te cuente como perdí todo para poder tener y sacar adelante a ese niño que ahora descaradamente llamas hijo? No tienes el derecho, no hay manera de que puedas ver a mi hijo, porque sí, es solo mío, mi hijo, puedes hacer lo que quieras, no te permitiré estar en su vida.
-Eso no depende de ti, te lo estoy pidiendo por las buenas, no me obligues a llevar esto a la corte, ellos sabrán y harán valer mis derechos y lo sabes -afirmó clavando su mirada en mí.
-Eres un sinvergüenza, como te atreves, con qué derecho, hace 6 años me dejaste cuando más te necesitaba, ahora vienes como si nada. Lárgate, si antes rogué, supliqué, me arrastré para que no me dejaras sola con mi hijo, ahora de esa misma manera estoy dispuesta a pedirte que te largues. Que nos dejes en paz, no te necesitamos, mi hijo no te necesita, lárgate con todo y tus millones.
-Todos cometemos errores y yo cometí uno al dejarte sola con nuestro hijo, pero no lo sabía, llevó meses tratando de acercarme por las buenas a mi hijo y me lo has impedido, déjame ver al niño, no me obligues a usar mis influencias, las cosas podrían terminar mal para ti. -amenazó con voz intimidante.
-Haz lo que quieras. ¿Que tipo de ser humano eres? Como siquiera, puedes atreverte a decirme eso, ¿eres consciente del daño que me causaste con tu partida? ¿No lo sabes verdad? Mis padres me corrieron de su casa, me vi en la calle, si no hubiera sido porque Flor nos recogió, hoy no habría hijo al que quisieras ver.
Intentó interrumpir, pero estaba tan molesta que no lo permití.
-¿Tienes idea de todo lo que padecí? No, no tienes idea, porque mientras tú te divertías, mientras seguías jugando a ser el intocable hijo de papi y mami, yo me acostaba preguntándome como iba a recibir a mi hijo, qué futuro le brindaría. ¿Con qué estúpido derecho vienes ahora a querer ser un padre ejemplar? ¿Olvidaste como en ese aeropuerto, pedí que no te fueras? ¿Olvidas que preferiste irte del país a vivir tu vida, sin mi hijo? Pues bien, ahora vete, lárgate y no regreses jamás.
-Yo no lo sabía, no tenía idea de tu embarazo, pero olvida el pasado, sé que sufriste, pero que importa eso ahora, mira, yo solo quiero ver a mi hijo y lo lamento, si para eso tengo que lastimarte, tengo tanto derecho como tú y lo sabes, ahora soy un hombre en aquel tiempo era un adolescente, ahora puedo hacerme cargo de mi hijo -argumentó sonriente-. Quiero verlo y no serás tú quien me lo impida, mi madre está enferma y quiere conocer a su nieto antes de que sea tarde.
Le cerré la puerta en la cara, no podía creer el colmo de su descaro, corrí a la habitación de mi hijo, estaba dormido, me acosté a su lado, haría cualquier cosa para evitar que él se acercará, sé que no quería a mi hijo de la manera en que debería, no le interesaba más que el mismo.
Siempre que miraba a mi hijo me preguntaba que estaría pagando para que hubiera salido tan parecido a él, Lyan era mi vida y por ningún motivo dejaría que Kyle se acercara a él.
-¿Mami, por qué estás llorando? - preguntó Lyan, acercándose.
-Por nada mi amor, mami, solo está feliz de tener un hijo tan hermoso y listo como tú. ¿Lyan tú sabe lo mucho qué mami te adora?
-Ya no estés triste mami, te amo mucho. Voy a darte un abrazo para que cure tus tristezas.
Su ternura me derretía, me reconfortaba, mientras lo abrazaba, no podía dejar de pensar, había dicho que no sabía nada. Una mentira más, sabía que él me veía en su casa, cuando le supliqué una y otra vez a sus padres verlo. Incluso cuando para evadir su responsabilidad decidió irse del país, en el aeropuerto me ignoró.
-Amor, mañana no iras a la escuela, quiero llevarte a un lugar muy especial al que mami le gustaba ir cuando tú eres muy bebé. Vamos a saludar a la abuelita que ya ha llegado del trabajo.
Después de que mi nana hablará con Lyan sobre su día, le pedí hablar, le conté lo que Kyle me había dicho y por supuesto, al igual que a mí, la idea le molesto, ella había sido la única que se había quedado, cuando todos me dieron la espalda al saber que estaba embarazada.
Sí, mis padres me echaron de su casa, mis amigos me dieron la espalda y ni hablar de Kyle, se había dado el lujo de ignorarme, de huir, de que sus padres trapearan el piso conmigo, jamás olvidaré que me dejó, queriendo evadir su responsabilidad, sus padres habían dicho que él afirmaba que ese hijo que esperaba no era de él.
Flor me había acogido renuncio a trabajar con mi padre y nos regresamos a su pueblo, en esos 6 años mis padres no me buscaron, nadie se interesó por mí. No entendía como Kyle aparecía como si nada, pretendiendo acercarse a mi hijo.
-No le permitiré eso nana -afirmé con voz firme, poniéndome de pies.
-Qué descarado, como es que puede haber gente tan falta de valores, acaso no tiene memoria, como es posible que haya dado con nosotras. ¿Hija venía solo? -preguntó mi madre con la ternura que la caracterizaba.
-No madre, parecía que tenía 4 guardaespaldas con él, ya sabes con eso de que es el futbolista del momento. No sabes cuanto lo odio, desearía que nunca se hubiera aparecido, abrázame, nana, amor, ven -le extendí los brazos a mi pequeño-. Necesito un abrazo de ustedes dos, qué día tan estresante.
-No te preocupes, hija, mantén la calma, los planes de Dios son perfectos -dijo paciente y sonriente.
-Si madre lo sé, le pido perdón a Dios, pero no quiero que en sus planes este que él se acerque a mi hijo.
Cambié mi vida, mi residencia, con la única intención de conocer y enamorar a la culpable del deceso de mi padre. Lo conseguí. La hice mi esposa, conseguí que me amara, en el proceso me enamoré, pero no importó, la destruí. Sin saber que su único error fue enamorarse, hice de sus días a mi lado un infierno, todo para descubrir que ella no era la mujer de la que debía vengarme. Desde entonces viviré por su perdón Prohibido distribuir, adaptar o copiar de forma parcial o total el contenido. Copyright © 2023 Todos los derechos reservados.
Se sentía usada por quien en el momento era su jefe, había hecho todo por el, se había entregado y sé sabia enamorada, pensar que el sentía lo mismo fue un gran error, todo dio un giro inesperado para Tiana al saber que su jefe no tenía las intenciones con ella, ideando un plan con el cual haría que el se sintiera del mismo modo, sin imaginar que en busca de aquel placer de verlo a sus pies terminaría en un mundo de problemas, los cuales le servirán para aclarar sus sentimientos y no solo a ella. Un jefe desilusionado, lleno de miedos y rencor hacia el amor. Una empleada inteligente, dedicada, amorosa y con ilusiones. Su reto vencer las adversidades, el orgullo, los malos entendidos y reconocer sus sentimientos.
Quería huir, en un escape sin rumbo, entonces la conocí, me tropecé con un ángel sin imaginar que desde esa noche sería la única melodía que mis manos anhelarían tocar, no lo supe de inmediato. Una noche que no olvidaría, marque mis huellas en su piel, ella tatuó su nombre en mi alma, la hice mía, y se marchó. «No puede sacarla de mí; creí que amaba a otra mujer, y que ella, ese ángel, cumpliría su papel, para ayudarme a recuperar a esa mujer» Eran mis planes, pero ella es un ángel al cual no fui inmune, un ángel enviado a la medida, ella es la perfecta melodía nunca jamás tocada.
Para Zia conocer a Hades será un giro en su vida que nunca imaginó, con el experimentará todo tipo de emociones y sentimientos, conocera el placer, el odio, el dolor y el amor. Zia tendrá que ser fuerte, pues Hades es un chico dominador acostumbrado a tomar el control por encima de todo aunque Zia logra que este se enamore de ella tendrá que descubrir si es lo que realmente desea en su vida, tendra que decidir si realmente quiere ceder el control y permitir que Hades la controle.
"¡Ahh!". Ella solo podía gemir, a pesar de que no amaba a ese hombre; de hecho, lo odiaba. Las manos del hombre recorrían todo su cuerpo. Ella jadeó cuando él comenzó a bajarle el cierre del vestido. Este terminaba en su cadera, así que terminó con la espalda y la cintura descubiertas. "No me toq... ¡mmm!". El hombre movió sus dedos por su espalda descubierta y presionó su cabeza contra una almohada. Los toques le provocaron escalofríos a la chica. "Haré que te olvides de sus toques, besos y todo lo demás. Cada vez que toques a otro hombre, solo podrás pensar en mí". ---- Ava Adler era una omega nerd. Los demás la molestaban porque pensaban que era fea y poco atractiva. Pero Ava amaba en secreto a un chico malo, Ian Dawson. Él era el futuro Alfa de la manada Mystic Shadow. Sin embargo, a él no le importaban las reglas ni las leyes, solo le gustaba coquetear con las chicas. Ava no era consciente de la arrogancia de Ian hasta que su destino se entrelazó con el del joven. Él la descuidó y la hirió profundamente. ¿Qué pasaría cuando Ava se convirtiera en una bella capaz de conquistar a cualquier chico y, al verla, Ian se arrepintiera de sus decisiones? ¿Y si ella tenía una identidad secreta que aún no había descubierto? ¿Y si cambiaban las tornas e Ian le suplicaba que no lo dejara?
Janice, la heredera legítima olvidada hace tiempo, se abrió camino de vuelta a su familia, volcándose en ganarse sus corazones. Sin embargo, tuvo que renunciar a su propia identidad, sus credenciales académicas y sus obras creativas en favor de su hermana adoptiva. A cambio de sus sacrificios, no encontró calor, sino un mayor abandono. Decidida, Janice juró cortar todo vínculo emocional con ellos. Tras quitarse la máscara, ahora era conocida como maestra en artes marciales, experta médica y célebre diseñadora que sabe ocho idiomas. Con una nueva determinación, declaró: "A partir de hoy, nadie de esta familia se cruzará conmigo".
Tras dos años de matrimonio, Sadie por fin estaba embarazada, llena de esperanza y alegría. Pero su corazón rompió cuando Noah le pidió el divorcio. Durante un atentado fallido contra su vida, Sadie se encontró tendida en un charco de sangre, llamando desesperadamente a Noah para pedirle que la salvara a ella y al bebé. Pero sus llamadas quedaron sin respuesta. Destrozada por su traición, abandonó el país. Pasó el tiempo y Sadie estaba a punto de casarse por segunda vez. Noah apareció enloquecido y cayó de rodillas. "¿Cómo te atreves a casarte con otro después de haber dado a luz a mi hijo?".
Ellos no saben que soy una chica. Todos me miran como si fuera un hombre, un príncipe. Su especie compra humanos para satisfacer sus lujuriosos deseos. Y cuando ellos llegaron a nuestro reino para llevar a mi hermana, intervine para protegerla. Fue así como ellos también terminaron comprándome. El plan era escapar, pero mi hermana y yo nunca tuvimos una oportunidad. ¿Cómo iba a saber que nuestra prisión sería el lugar más fortificado de su reino? Se suponía que debía quedarme en el anonimato, pues no tenían un uso para mí. Solo era alguien a quien nunca debían comprar. Pero entonces, el hombre más poderoso de la salvaje tierra, su despiadado rey bestia, se interesó por ese "principito bonito". ¿Cómo podremos sobrevivir en este reino brutal, donde todos odian a los de nuestra especie y no tienen piedad de nosotros? ¿Y cómo puede alguien, con un secreto como el mío, convertirse en una esclava sexual? Nota del autor: es una novela de romance oscuro, apta solo para mayores de edad. Espera varios temas sensibles, como la violencia. Si eres un lector experimentado de este género, buscas algo diferente y estás preparado para entrar sin saber qué es lo que te espera, ¡entonces sumérgete en esta aventura! . De la autora del bestseller internacional "La Esclava Más Odiada Del Rey"
Paola Fischer vive un matrimonio aparentemente feliz hasta el día en que, al regresar a casa, encuentra a su esposo, Lucas Hotman, en la cama con su secretaria, Rose Evans. La traición la deja destrozada, y, sin saber cómo enfrentar el dolor, se marcha de su hogar. Esa noche, en un bar, conoce a un enigmático desconocido que le ofrece una compañía inesperada. Buscando escapar de su desilusión, Paola se entrega a una noche de pasión con él, dejando que el dolor de su traición se diluya en la intimidad. Al día siguiente, trata de seguir adelante, pero pronto se enfrenta a una sorpresa que cambia el curso de su vida: está embarazada, y el padre no es Lucas, sino aquel hombre al que apenas conoció.
Linsey fue abandonada por su novio, quien huyó con otra mujer el día de su boda. Furiosa, ella agarró a un desconocido al azar y declaró: "¡Casémonos!". Había actuado por impulso, pero luego se dio cuenta de que su nuevo esposo era el famoso inútil Collin. El público se rio de ella, e incluso su fugitivo ex se ofreció a reconciliarse. Pero Linsey se burló de él. "¡Mi esposo y yo estamos muy enamorados!". Aunque todos pensaron que deliraba. Entonces se reveló que Collin era el hombre más rico del mundo. Delante de todos, se arrodilló y levantó un impresionante anillo de diamantes mientras declaraba: "Estoy deseando que sea para siempre, cariño".