/0/4694/coverbig.jpg?v=df9701d68b4aa1a8c5b9b21c5f77215b)
Gea es una estudiante de instituto normal y corriente, muy romántica, aunque no tiene mucho éxito con los chicos. A diferencia de su hermano, Matt es un joven rudo y poco amable con los demás, pero se preocupa por su hermana más que por cualquier cosa en el mundo. Un día, la suerte cambia para Gea, cuando tres jóvenes a puestos aparecen en su vida para conquistar su corazón. Aunque Matt no está de acuerdo con esto, hará lo que sea para que no lastimen los sentimientos de Gea. Pero un secreto saldrá a la luz, complicando las cosas y haciendo que Matt siga ocultando el amor que siente hacía su pequeña hermana.
~(GEA)~
Toda mi vida he soñado con conocer el primer amor. Pero cada que pienso que lo hago bien, termina todo mal.
Todo comenzó cuando tenía 8 años, en un intercambio de la escuela. Era San Valentín, y por azares del destino me tocó regalarle al niño que me gustaba.
Durante el día estaba nerviosa, porque no solo quería darle un obsequio especial, si no también quería que supiera lo que sentía por él.
GEA: Luke, este es tú regalo.
LUKE: Gracias Gea.
Luke tomó el obsequio, pero antes de que se fuera, lo tome de su chamarra y le dije lo que sentía.
GEA: Tú me gustas.
En ese momento, Luke se dio la vuelta y me miró por un instante, pero apartando mi mano de él me dio una respuesta.
Luke: Lo siento, pero tengo novia.
¿Es enserio? Me decía a mí misma. Y yo que estaba segura de que no tenía novia.
Pero desde esa triste experiencia, todos los chicos me han bateado.
Uno porque estaba fea, otro que porque estaba gorda, hubo uno al que no le gustaban mis gafas. Pero en ese tiempo era necesario usarlas.
Cada intento que hacía, recibía un NO como respuesta. Y todo porque no era la chica de sus sueños.
Así que decidí hacer unos cambios en mi vida. Pero ni siquiera el cambio logró que conquistara a un chico. Y ahora estoy aquí, sola a mis 16 años, sin siquiera conocer el amor.
MATT: ¡Chewbacca, baja a desayunar!
Mi hermano a diferencia de mí, es un delincuente, o al menos así lo conocen todos.
Desde que tengo memoria, él siempre ha sido muy peleonero, no sale mucho con las chicas y no tiene amigos. Bueno, solo uno y prácticamente parece su hermano, pues ambos crecieron juntos.
Sin embargo, a pesar de su comportamiento él es muy inteligente. Es el primero de la clase y eso le da privilegios de hacer lo que él quiera.
Cosa que a mí me molesta.
Gea: ¡No me digas así! ¡Mamá, Matt me está molestando!
Helen: ¡Matt, respeta a tú hermana!
Matt: Yo la respeto mamá, pero dile que quite sus cabellos del baño.
Enojada por su comentario, me dirigí a la mesa y me senté para desayunar. Pero mi hermano siguió molestando.
Joseph: Ya cálmense los dos, parecen niños de 5 años por amor del cielo.
Gea: El comenzó papá, no deja de decirme Chewbacca.
Matt: Al menos yo no soy una mujer con bigote.
Gea: ¿Qué?
Rápido me levanté y fui al baño para ver que no tuviera vellos arriba de mis labios. Pero entonces comencé a escuchar las carcajadas de mi hermano.
Cómo cualquier mujer tengo defectos. Pero hay uno con el que tengo que lidiar todos los días. Y es que soy un poco más velluda que las demás mujeres que conozco. Así que me levanto muy temprano todas las mañanas para depilarme.
Esa es la razón por la que recibí el apodo de Chewbacca.
<...>
De camino a la escuela, mi hermano y yo nos vamos siempre en bicicleta. Pero antes hacemos dos paradas muy importantes.
La primera parada es para recoger a Jake, el mejor y único amigo de mi hermano. Y como segunda y última parada pasamos por mi mejor amiga Kaylee.
Matt y Jake son dos años mayor que nosotras. Ellos ya están por terminar el instituto y entrar a la universidad. Mientras que Kaylee y yo estamos por terminar nuestro primer año de instituto.
Hoy inicia nuestro segundo semestre, y a comparación de Matt, yo no soy tan inteligente. En las vacaciones tuve que venir a clases para reponerme y no repetir el semestre. Mientras que mi familia se fue de vacaciones a la playa.
Kaylee: ¿Ya pensaste a quién llevarás al baile de San Valentín?
Gea: No, aún no. Todos los chicos que estuve invitando me dijeron que no. Incluso hubo uno que me preguntó si Matt estaba soltero. ¿Lo puedes creer Kaylee? Incluso los chicos prefieren más a mi hermano que a mí.
Estoy pensando en darme por vencida, pues ya no soporto tanta humillación.
Kaylee: Debes aceptar que tú hermano es lindo. Su personalidad agresiva y su inteligencia, hacen una combinación que atrae a cualquiera. Hasta las maestras están detrás de él.
Su último comentario me hizo reír, pero ella tenía razón. No sé qué le ven a mi hermano, pero toda mujer que lo ve come de la palma de su mano.
Durante la clase de deportes, se acercó la persona más desagradable con quién lamentablemente tengo que lidiar.
Ruth: Hola cuñada, necesito que me hagas un favor.
Gea: ¿Aún no te das por vencida?
Ruth: Si mal no recuerdo, tú y yo hicimos un trato. Tú me ayudarías a conquistar a tú hermano y yo te ayudaría a conseguir un novio.
Kaylee: Eso se lo llevas diciendo desde que entramos al instituto, y tú ni siquiera has cumplido con tu palabra.
Ruth: ¿Te importa? Estoy hablando con el dueño del circo, no con sus animales.
Gea: Ok, ya basta. ¿Qué es lo que quieres ahora?
Ruth: Este fin de semana tendremos una cita doble. Un amigo mío que es modelo aceptó conocerte. Así que deberás llevar a tú hermano para poder conocerlo.
Gea: ¡¿De verdad?!
Nunca me había puesto tan feliz como el día de hoy. ¡Al fin tendré una cita!
Toda la semana estuve contando lo días para que llegará el sábado. Sin embargo había un problema, y es qué aún no le he dicho a Matt sobre la cita doble.
Al llegar la noche del viernes, me arme de valor y toque la puerta de su habitación para charlar.
Matt: ¡Adelante!
Antes de entrar, respire profundo y abrí la puerta.
Gea: ¿Qué estás haciendo?
Matt: Leyendo un libro. ¿Se te ofrece algo Chewbacca?
Gea: Pues verás...
Como no sabía que decir, tarde unos minutos en hablar y eso hizo que se impacientara.
Matt: ¡Ya dime qué quieres!
Gea: Quiero que me acompañes mañana al cine.
Matt: Ok
Gea: ¿Qué?
Matt: Que sí, iré contigo.
Pero entonces pensé si sería bueno contarle el resto, aunque si lo hago puede que termine diciéndome que NO.
Gea: Ok, gracias.
Rápido me giré y salí de su cuarto. Aún seguía sin creer que había aceptado. Bueno, o al menos eso quería creer.
¿Ahora qué voy hacer?
Mañana me va matar Ruth, y si por azares del destino su amigo y yo somos compatibles, ella seguro se encargará de arruinarlo.
Durante la noche no deje de pensar en un plan para que todos convivieran sin sospechar nada. Y entonces se me ocurrió una gran idea.
A la mañana siguiente le mandé un mensaje a Ruth para que nos viéramos en el Acuario. Ella me preguntó el porqué del cambio de planes, y yo le dije que a mí hermano le gusta más ir al acuario que al cine. Así que gracias a mi mentira dejó de replicar.
En el desayuno le dije a mi hermano sobre el cambio de planes. Y aunque me miro con sospecha por un momento, aceptó ir conmigo.
Cerca del acuario se encontraba una exposición de dinosaurios en el museo. Y por apertura, todos los fines de semana eran gratis, cambiando repentinamente todos mis planes.
Gea: Por favor Matt, tú dijiste que irías conmigo al acuario.
Matt: Si, pero ayer te dije que iría contigo al cine. Y como no entiendo el porqué de tu cambio tan repentino. Creo que es mejor ver la exposición de dinosaurios.
Lamentablemente, perdí la batalla. Y Matt terminó saliéndose con la suya.
Al entrar al museo, me dirigí al baño y deje a mi hermano esperando en la recepción del guía.
De mi bolso saqué mi celular y llamé a Ruth, quién no dejaba de gritarme por el auricular.
Cuando salí del baño, me topé de frente con un chico muy apuesto. Sus ojos eran color aceituna, su cabello era de un tono rubio dorado y su porte era increíble.
La mujer que sea su novia debe ser muy afortunada.
Gea: Disculpa, no me fijé por donde iba.
El chico lindo se disculpó también y se presentó. Al mismo tiempo que tomaba mi mano. Su nombre era Chase y es modelo de ropa deportiva juvenil.
En ese momento, abrí los ojos y me di cuenta que Ruth ya había llegado y que ahora se encontraba con mi hermano. Eso significaba que este chico apuesto era mi cita.
Al acercarme, Matt me miró con enfado y sin hablar nada, más que con el movimiento de sus labios, dijo: Te voy a matar.
Durante todo el recorrido no pude disfrutar de mi cita. Ya que mi hermano no dejaba de avergonzarme. Pero para felicidad mía, eso no le importó a Chase.
Al llegar la tarde, Chase y yo intercambiamos números. Pero en cuanto a Ruth, ella no tuvo la misma suerte que yo.
En la semana Chase me mandó un mensaje para que saliéramos el próximo fin de semana. Y por supuesto que yo acepté. Por fin estaba conociendo a alguien que podría llegar a ser mi novio. Y tal vez en un futuro, si todo sale bien, nos casemos y tengamos dos hijos: Sofía y Liam.
Al fin llegó el sábado, y yo me aliste poniéndome un vestido color coral, unas zapatillas blancas y un bolso beige para combinar.
~(MATT)~
Conozco muy bien a mi hermana, y sé que hoy planea salir con ese modelito de cuarta.
Jake: ¿Por qué quieres ir al acuario?
Matt: Ya te lo dije, es un secreto. Ahora ponte esto.
Jake: No me vestiré como chica. ¿Acaso te volviste loco?
Matt: Por favor Jake, si haces esto por mí yo te ayudare para que salgas con Kaylee en una cita...lo prometo.
Durante la cita de mi hermana, Jake y yo la seguimos, pues no confío para nada en ese tal Chase.
Su primera parada fue en el cine, y durante la función no dejaba de acariciar su mano. Pero cuando quiso abrazarla, tomé nuestras palomitas y se las tire encima.
Chase: Cuidado amigo.
En ese instante le di un codazo a Jake para que contestara por mí.
Jake: (Hablando como una chica) Cómo lo siento, fue mi culpa, es que soy tan distraída.
Gea: Será mejor ir al baño a que te limpies.
Chase: Esta bien, vamos.
Cuando salieron de la sala, los comenzamos a seguir de nuevo.
Jake: Si todo se trataba de tu hermana ¿por qué no te pusiste tú el vestido?
Matt: Porqué tu eres más escuálido.
Jake: Ni como alegarte eso. Pero no crees que ya este sospechando. Ambos parecemos el Sr. y la Sra. Smith, y con estas gafas oscuras llamamos mucho la atención.
Matt: Ya deja de rezongar y camina. Creo que se dirigen al acuario.
Al entrar al lugar, tratamos de seguirlos de cerca. Ya que el acuario es inmenso y es muy fácil perderlos de vista.
Después de avanzar dos exhibiciones, perdí de vista a Jake. Pero como no planeo perder a Gea, seguí caminando.
Cuando llegaron a la exhibición de tiburones, Chase se apartó por un momento de ella y se fue.
De lejos no dejaba de verla, en verdad se veía bonita. La luz que se reflejaba en el agua la hacía parecer una linda sirenita.
Como Chase comenzó a tardar, ella lo fue a buscar. Y para tristeza suya, lo encontró besándose con una de las trabajadoras del lugar.
Gea se dio la vuelta y con lágrimas salió del lugar.
Pero yo no me quede con los brazos cruzados. Así que me acerqué, y tomándolo del hombro lo gire y le pegue en la cara, hasta tirarlo al suelo.
Chase: ¿Estás loco?
Matt: No quiero que te vuelvas a acercar a mi hermana nunca. Si lo haces te destrozare la cara para que ya no tengas que modelar.
Chase: Pero si eres su hermano, la niñera. Que infantil aventarme las palomitas en el cine. ¿En verdad creíste que no me di cuenta que nos estabas siguiendo?
Matt: No me interesa si lo supiste o no. Pero no te quiero ver cerca de mi hermana de nuevo.
Chase: Tú hermana es una pobre ilusa. Ruth tenía razón, ella está tan desesperada de afecto que saldría con cualquiera que le dijera algo bonito.
Un segundo golpe bastó para que cerrara la boca y suplicara.
Ese chico es un cobarde. Y en cuanto a Ruth, yo me encargaré de dejarle las cosas en claro para que deje de fastidiarnos.
Al dirigirme a casa me encontré con Gea, quién estaba cerca de un kiosco, a orillas del parque.
Verla de esa manera me rompe el corazón.
~(GEA)~
Matt tenía razón. Chase jamás se hubiera fijado en mí realmente. Ni siquiera soy de agrado para un modelo.
Por más que quería detener mis lágrimas, estás no dejaban de brotar.
Hasta que sentí un ligero golpe en mi espalda.
Matt: ¿Estás bien Chewbacca?
Mi Hermano se sentó a mi lado, mientras me daba un pañuelo.
Gea: Tenías razón sobre Chase. Es un mujeriego. Hoy salió conmigo, pero en un descuido ya estaba besando a otra.
Matt: A veces los hombres somos unos tontos. Y no vemos lo maravilloso que está en frente de nosotros.
Limpiándome las lágrimas, no dejaba de agradecerle sus palabras de ánimo.
Gea: Por cierto, gracias por lo que hiciste hoy.
Matt: ¿Yo?
Gea: Me encontré a Jake y me dijo lo que hiciste. Tanto en el cine, cómo la golpiza que le diste a Chase.
Matt: Ese lengua larga, lo estuve buscando y nunca lo encontré. Pero será mejor que no le digas a nadie. Tengo una reputación que cuidar, además, yo soy el único que te puede hacer llorar.
Con una ligera sonrisa le di un pequeño golpe en el hombro, haciendo que él también se riera conmigo.
Gea: Eres muy malo conmigo, pero sé que en el fondo me quieres mucho. Si no fuéramos hermanos, tal vez saldría contigo en una cita.
Ante mi comentario, Matt dejo de reírse y se puso serio. De repente me miró fijamente y comenzó a acercarse. Por un momento pensé que me iba besar.
Pero justo cuando nuestros rostros estuvieron muy cerca, se comenzó a reír.
Matt: Yo no salgo con Chewbaccas.
Rápido tomé aire y lo empuje. Después agarré mis cosas y me fui, dejando atrás al burlón de mi hermano.
~(MATT)~
Mientras ella se iba, no dejaba de pensar en que si no fuéramos hermanos, seguro que yo saldría con ella
Pues una parte de mí la ama demasiado.
Charles tenía novias diferentes cada día del año, nunca salía con la misma chica. Su nombre había sido vinculado a innumerables mujeres. Autumn, por su parte, se vio obligada a casarse con Charles sustituyendo a su hermana, quien se había escapado. Su único deseo era divorciarse después de un año. Ninguno de los dos había esperado que se enamoraran el uno del otro. Tampoco esperaban que el mundo entero los desafiara. Una ex novia quien causa problemas cada dos por tres. Una hermana fugitiva quien regresa con la intención de recuperar a Charles. Una suegra que siempre se entromete en sus momentos íntimos. ¿Te gustaría leer más? ¡No dudes! ¡Vamos allá!
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Celia Kane proviene de una familia adinerada, pero perdió a su madre a una edad temprana. Desde entonces, ha vivido una vida difícil. Peor aún, su padre y su madrastra le tendieron una trampa para que ella se casara con Tyson Shaw en lugar de su media hermana. No dispuesta a aceptar su destino, Celia se escapó el día de la boda y, accidentalmente tuvo una aventura con un desconocido. Al día siguiente, ella se fue en secreto y, más tarde, su padre la encontró. Habiendo fracasado en escapar de su destino, se vio obligada a convertirse en la novia sustituta. Inesperadamente, su esposo la trató muy bien después de la boda. Celia también conoció poco a poco que él tenía muchos secretos. ¿Descubriría Celia que el hombre con el que se acostó era en realidad su marido? ¿Tyson sabría que Celia era solo una sustituta de su media hermana? ¿Cuándo iba a descubrir Celia que su anodino marido era en realidad un magnate misterioso? Descúbralos en este libro.
Janet fue adoptada cuando era niña, un sueño hecho realidad para los huérfanos. Sin embargo, su vida fue cualquier cosa menos feliz. Su madre adoptiva se burló de ella y la acosó toda su vida. La mucama que la crio le dio todo el amor y el afecto de una madre. Desafortunadamente, la anciana se enfermó gravemente y Janet tuvo que casarse con un hombre que tenía mala fama en sustitución de la hija biológica de sus padres para cubrir los gastos médicos de la criada. ¿Podría ser este un cuento de Cenicienta? Pero el hombre estaba lejos de ser un príncipe, aunque tenía un rostro atractivo. Ethan era el hijo ilegítimo de una familia rica que vivía una vida lujosa y apenas llegaba a fin de mes. Él se casó para cumplir el último deseo de su madre. Sin embargo, en su noche de bodas, tuvo el presentimiento de que su esposa era diferente a lo que había escuchado sobre ella. El destino había unido a las dos personas con profundos secretos. ¿Ethan era realmente el hombre que pensábamos que era? Sorprendentemente, tenía un extraño parecido con el impenetrable hombre más rico de la ciudad. ¿Descubriría que Janet se casó con él por su hermana? ¿Sería su matrimonio una historia romántica o un completo desastre? Siga leyendo para saber cómo se desarrolla el amor entre Janet y Ethan.
El marido de Vivianna se casó con ella por su herencia, y después de quitarle todo lo que tenía, la mandó a la cama de un acompañante y le tomó fotos. La amenazó con divorciarse con esas fotos y la obligó a salir de su casa sin un centavo. Dejó su país de origen en desgracia. Cuatro años más tarde, regresó a casa como Jefa de Diseño de Joyas y tuvo un hijo de tres años. Su niño genio le dijo después de bajarse del avión: "¡Conseguiré que el hombre más rico del mundo sea mi papá y te respalde!" Ella lo tomó como una broma, pero dos días después, su asistente le dijo que el hombre más poderoso del mundo se había robado a su hijo y la invitó a cenar. Al encontrarse, ese hombre sostuvo a su hijito y le dijo dominantemente: "Es mi hijo!".
Lucía Balstone pensó que había elegido al hombre adecuado para pasar el resto de su vida, pero fue él quien acabó con su vida. Su matrimonio de diez años parecía una broma cuando su esposo la apuñaló con una daga. Afortunadamente, Dios nunca está ciego ante las lágrimas de las personas. Lucía tuvo una segunda oportunidad. Ella renació a la edad de 22 años, antes de que sucedieran todas las cosas terribles. ¡Esta vez, estaba decidida a vengarse y dejar que aquellos que la lastimaron pagaran! Hizo una lista elaborada de sus objetivos, y lo primero en su lista era casarse con el peor enemigo de su exmarido, ¡Alonso Callen!