/0/13891/coverbig.jpg?v=66b37eb8b1c7502e6e58caeab2c07925)
Annie jamás imaginó que se vería involucrada en algo tan extremo como el secuestro del presidente de su país. Durante un mes, es la encargada de cuidar al cautivo, John Meyer. Al principio, Meyer se muestra frío y hostil, respondiendo a su secuestradora con insultos y desconfianza. Sin embargo, la dulzura y ternura de Annie comienzan a romper sus barreras, y él se deja cautivar por su bondad. A medida que pasan los días, un vínculo inesperado se forma entre ellos. Annie, consciente del peligro en que se encuentra Meyer, decide ayudarlo a escapar, poniendo en riesgo su propia vida y la de su familia. Agradecido por su valentía y sacrificio, Meyer la lleva consigo. Annie se convierte en su aliada más confiable, la única capaz de ayudarlo a desentrañar la conspiración en su contra. ¿Podrá John frustrar el complot de asesinato que se cierne sobre él? ¿Logrará Annie su propia venganza? Una historia de intriga, traición, venganza y, sobre todo, un profundo amor❤️
John Meyer, el presidente más joven en la historia de su nación a los 43 años, era conocido por su devoción al país y por ser querido por casi todos los ciudadanos. Su gran inteligencia y sus brillantes ideas políticas, económicas y sociales habían llevado al país a un superávit económico. Logró atraer a grandes inversionistas internacionales, convirtiendo a la nación en la nueva mina de oro de la región.
John también era reconocido mundialmente por su atractivo físico: tenía ojos azules deslumbrantes, una altura imponente de 1.90 metros, un físico robusto esculpido con largas sesiones de gimnasio, labios carnosos y cabello negro azabache que siempre llevaba ligeramente despeinado, lo que añadía a su atractivo. Aunque se mencionaba en programas de entretenimiento que había trabajado como modelo de pasarela para costear sus estudios, estas imágenes habían sido eliminadas de su entorno político para evitar posibles críticas.
A su lado en el gobierno estaba Maxwell McGregor, su vicepresidente y mejor amigo desde la universidad, donde ambos estudiaron ciencias políticas y soñaban con hacer prosperar su país. Max admiraba profundamente a John por su gran corazón, su trabajo benéfico y sus inversiones en salud y educación pública, convencido de que estos eran derechos fundamentales y no privilegios.
John se encontraba en su despacho, ultimando los detalles de su próximo discurso. En unos días viajaría a la capital del país para asistir a una convención por la paz, donde se reunirían varios líderes mundiales para abogar por el fin de un conflicto bélico en una región cercana. Sin embargo, alguien desconocido planeaba evitar a toda costa que John asistiera a esa convención.
---
Annie Taylor no podía creer lo que estaba leyendo en el sobre que sostenía. Las lágrimas brotaban de sus ojos y su desesperación era tan grande que debía taparse la boca para no gritar y despertar a su hermano pequeño, Marcus. El cáncer de su madre había regresado y, sin tratamiento de quimioterapia, le quedaba poco tiempo de vida. Annie lloraba desconsoladamente. Desde que su padre los había abandonado hacía 17 años, habían sobrevivido apenas, viviendo en tierras usurpadas en un tráiler abandonado. No podían permitirse un tratamiento tan costoso, ni siquiera las nuevas políticas de salud del presidente podían salvar a su madre.
Tras levantarse y bañarse en una palangana, despertó a Marcus para que desayunara y se preparara para la escuela. Ella había tenido que dejar la escuela a una edad temprana y apenas sabía leer y escribir, pero estaba decidida a darle a su hermano la oportunidad de una educación digna, para que no tuviera que vivir en la miseria.
Después de desayunar, Annie acompañó a Marcus al colegio y luego se dirigió al vertedero de la ciudad. Allí, junto con otros vecinos, recogía basura que clasificaban y vendían para ganar algo de dinero, lo suficiente para llevar algo de comida a la mesa. Siempre había soñado con ser algo más que una recolectora de basura, pero la falta de educación y oportunidades le cerró las puertas. En su intento por escapar de la pobreza, se fue a la ciudad, pero terminó durmiendo en la calle, humillada y sin el dinero que había ahorrado. Derrotada, regresó con su familia, sin esperanzas de un futuro mejor.
Mientras rebuscaba en la basura, las lágrimas volvieron a correr por sus mejillas. Necesitaba encontrar algo valioso para vender, o de lo contrario, esta noche no habría cena y tendría que ver a Marcus llorar de hambre una vez más.
-Otra vez llorando, niña -dijo una voz a sus espaldas. Era Noreen, una vecina que siempre se compadecía de la dura vida de Annie, cuidando a su madre enferma y criando a su hermano.
-Hola, Noreen -saludó Annie con una cálida sonrisa. Adoraba a esa mujer, que muchas veces había compartido su comida con ella.
-No disimules, Annie. Veo la tristeza en tus ojos. Ven, cuéntame, ¿qué ha pasado? -Noreen, que había perdido a su esposo a causa del cáncer el año anterior, entendía bien por lo que Annie estaba pasando. Incapaz de contenerse, Annie rompió a llorar de nuevo.
-Noreen... El cáncer ha vuelto. No sé qué hacer, estoy desesperada -dijo Annie mientras Noreen la abrazaba con cariño, tratando de consolarla aunque no encontraba palabras para aliviar su dolor.
-Tranquila, Annie. Algo se nos ocurrirá. Recaudaremos dinero entre los vecinos, como has hecho tú antes, para ayudar con la quimioterapia.
-Noreen... Hemos reunido dinero para medicinas menores, pero los tratamientos contra el cáncer son muy caros. Nunca podríamos juntar tanto.
-Annie... ¿Por qué no vuelves a la ciudad? Quizás esta vez tengas mejor suerte...
-¿Volver a la ciudad y aceptar el único trabajo que me ofrecieron? Ser prostituta en un burdel -respondió Annie con lágrimas en los ojos. No quería llegar a eso, pero si vendiendo su cuerpo podía salvar a su madre, lo haría sin pensarlo.
-No, niña, no lo hagas. Mereces mucho más que eso.
-¿Qué otra opción tengo, Noreen? La vida de mi madre se apaga con cada segundo que pasa.
-Annie... No debería decirte esto, pero ve a ver a Michel. Él siempre tiene algún trabajo, te lo ha ofrecido muchas veces y no has querido aceptar.
-Noreen, sabes que Michel se dedica a cosas sucias. Vende drogas y usa a jóvenes para robar. No puedo hacer eso.
-Annie... ¿Vas a esperar a que tu madre muera? No es la solución a todos tus problemas, pero al menos podrías juntar algo de dinero para llevar a Marcus y a tu madre a la ciudad. No lo pienses mucho.
-Tienes razón, Noreen -admitió Annie tras meditarlo-. No tengo nada que perder. Necesito conseguir el dinero para salvar a mi madre, y lo haré al precio que sea.
Tras dos años de matrimonio, Sadie por fin estaba embarazada, llena de esperanza y alegría. Pero su corazón rompió cuando Noah le pidió el divorcio. Durante un atentado fallido contra su vida, Sadie se encontró tendida en un charco de sangre, llamando desesperadamente a Noah para pedirle que la salvara a ella y al bebé. Pero sus llamadas quedaron sin respuesta. Destrozada por su traición, abandonó el país. Pasó el tiempo y Sadie estaba a punto de casarse por segunda vez. Noah apareció enloquecido y cayó de rodillas. "¿Cómo te atreves a casarte con otro después de haber dado a luz a mi hijo?".
Durante dos años, Bryan solo vio a Eileen como asistente. Ella necesitaba dinero para el tratamiento de su madre, y él pensó que ella nunca se iría por eso. A él le pareció justo ofrecerle ayuda económica a cambio de sexo. Sin embargo, Bryan no esperaba enamorarse de ella. Eileen se enfrentó a él: "¿Amas a otra persona y siempre te acuestas conmigo? Eres despreciable". En cuanto ella firmó los papeles del divorcio, él se dio cuenta de que era la misteriosa esposa con la que se había casado seis años atrás. Decidido a recuperarla, Bryan la colmó de afecto. Cuando otros se burlaban de sus orígenes, él le dio toda su riqueza, feliz de ser el marido que la apoyaba. Eileen, que ahora era una célebre CEO, lo tenía todo, pero Bryan se encontró perdido en otro torbellino...
Linsey fue abandonada por su novio, quien huyó con otra mujer el día de su boda. Furiosa, ella agarró a un desconocido al azar y declaró: "¡Casémonos!". Había actuado por impulso, pero luego se dio cuenta de que su nuevo esposo era el famoso inútil Collin. El público se rio de ella, e incluso su fugitivo ex se ofreció a reconciliarse. Pero Linsey se burló de él. "¡Mi esposo y yo estamos muy enamorados!". Aunque todos pensaron que deliraba. Entonces se reveló que Collin era el hombre más rico del mundo. Delante de todos, se arrodilló y levantó un impresionante anillo de diamantes mientras declaraba: "Estoy deseando que sea para siempre, cariño".
¿Qué esperas de tu cumpleaños? ¿Dinero? ¿Joyería? ¿U otras cosas? Lo que sea, pero por lo menos debe ser un día maravilloso. Lola Li, una mujer linda, encantadora e inteligente, graduada en la comunicación audiovisual a una edad muy temprana. Todo el mundo pensaba que Lola tendría un futuro muy prometedor pero las cosas no salieron como se esperaba. Su fiesta de cumpleaños de 22 años fue una pesadilla para ella. Cuando terminó su fiesta de cumpleaños, su mejor amiga la traicionó, su novio la abandonó y su familia se arruinó por completo. Cuando se despertó al día siguiente, Lola se encontraba tumbada en la cama de una habitación de hotel. Con el corazón acelerado, solo podía recordar vagamente a un hombre extraño con el que estaba anoche. ¿Había venido para salvarla? O, ¿era un demonio que lo estaba persiguiendo?
Eveline se casó con Shane, un obstetra, a la edad de 24 años. Dos años más tarde, cuando estaba embarazada de cinco meses, Shane abortó al bebé él mismo y procedió a divorciarse de ella. Fue durante estos tiempos oscuros que Eveline conoció a Derek. Él la trató con ternura y le dio el calor que nunca antes había sentido ella. También le causó el mayor dolor que jamás había tenido que soportar. Eveline solo se hizo más fuerte después de todo lo que experimentó, pero ¿podría soportar la verdad cuando finalmente se revelara? ¿Quién era Derek detrás de su carismática fachada? ¿Y qué haría Eveline una vez que descubriera la respuesta?
Ibiza fue invitada a un evento importante de la empresa para la que trabaja y allí se encontró con una desafortunada situación. Sin que se dieran cuenta le suministraron un fuerte afrodisiaco, el cual la hizo pasar la noche con un hombre supuestamente desconocido. Sin embargo, aquel hombre resultó ser uno de los hijos de su jefe, pero todo se tornó complicado cuando producto de esa noche ella quedó embarazada. ¿Qué sucederá cuando un padre rechace a su bebé sin haber nacido y encima de eso pretende que lo aborten? Esa es una buena pregunta si resulta que años después regresas en busca de perdón para enmendar el error que jamás debió de haber sucedido.