i
der que sería peor y me cansé de intentar. Dejo todo en las manos de Dios, si la bomba va a explotar lo hará tarde o temprano. Me pongo a mirar la pequeña habitación, es tan reducida. Este es el estudio de mi papá, tiene una cama de una plaza, la computadora en una esquina y libros en el estante. La casa es dúplex, arriba están los dos cuartos y me levanto de la cama. Estoy sin ánimos, pero la pastilla es obligatoria y me estiré. Agarré del escritorio el frasco y me dirigí hacia las escaleras. Bajo suave, me tropiezo y logré aguantarme del
s el tragar pastillas -frunció el ceño y negó so
u atenta mirada, me sostuve l
es muy complicado para mí.
l tamaño de
r la pastilla estalló en risa. Me rec
acerle entender lo que pasa por mi mente sin sonreír, pero fue imposible-. Me d
rminó mirándome-. Estoy muy orgulloso. -Su halago después de vacilar mi paté
ra -admití
ue increíble y si necesitas espacio, siempre eres bienvenida -depo
lamé molestando y él
ves de su hogar y
despejar la mente. Solo aparece, es pequeño el estudio, pero prometo quitar cosas y hacerlo más cóm
n solo por tener este escape-. Este sitio tiene cal
en el fregadero y puse mi llave en el coun
iré a trabajar, quisiera estar durmiendo, pero el trabajo me llama -dijo fingiendo tristeza, lo co
manos con la toalla que cuelga
es de ir a la lavandería. -Lo despedí con la ma
padre es muy guapo con su pelo negro en una cola de caball
n por la página. El sueño me ganó, estoy encima del diario y escuché el sonido de notificaciones. Me estiré y bostecé. Una vez despierta alargué la mano y sostuve el celular. Son
cómoda y lleva unos tenis, preferible "Vans" Estoy loco
o esc
me retas a vivir. Pensaba ir en tacas para "El mor
a oreja. Derramo mi bolso en la cama, tengo varias piezas de ropa y reflexiono que me pondré. ¡Oh dioses de las vans! Mis "Vans" florales las amo y he escuchado que en skateboa
-saludo m
tapé la cara y caminé por el poco espacio con mi sonrojo recorriendo mis mejillas. Escu
mular y sigue la risa explos
da-. No puedes negar que te encantó mi saludo, es dedicado a ti -mi cora
y como el dúplex es todo mío, pasearé con la toalla. El baño está abajo, mi p
a ha cesado-. Debo admitir que me gusta. Quería escuch
, al entrar al baño me veo en el
talarte -susurré emocionada al otro niv
vidad-, me acabo de recordar -silenció por un segundo y
drick. -Los nervios se intensifican e inten
-. Tus labios me incitan, me hacen caer hondo, pero no cambies de tema, Sirena
y explota en petardos?», es
cho que ere
Sirena me
iene muc
canturreó Ken y sonreí
posas en el estómago, ¿lo has escuc
enza, a lo que has ll
Uj
ndo, es fuerte y extremadamente ru
en la línea-. ¡¿Sigues ahí?! -bromeó porque
s ojos menos, abochornada-, y
r en la tablilla junto con la toa
en la línea -al menos no se explaya en carcajada-
scuchas lejos es que me ba
brí el grifo y ajus
. -ronroneó y mis mejillas se
solté a gritos para que pueda oírme por l
relajante -lo puedo imaginar en la almohada t
quido, mi padre siempre deja tod
-me gusta informarle mis asuntos y que él se inter
ue no veo por ningún lado champú. Nota: Comprar mi champú y dejarlo para cualquie
Ken y me estoy quitand
ón en los ojos, apagué el
s, aunque tus
é su risa y me i
tu chofer hoy -co
y sostengo el celular. Quité el altavoz, mis
epillo-. Espera que lavaré mis dientes -ladeé la
que sea necesario -susurró
fundo y escupir la pasta.
ié el resto del agua en la boca-. Además, no
édula por sus arrebatos
iras. Por supuesto, son paqueterías de él-. Cuando termines sal, aquí e
e rehúso y negué con la cabeza
a bocina y él gri
rda y consiguió que co
la cortina y pe
, Sirena -comen
casa, me saludó y me tiró una guiñada. Mi cara debe ser un camarón
tomate -sostengo mi estómago por todo el revuelo
sonrisa lucía-. Te dejo, me vestiré y si demoro es tu culpa -
reo que las vea, definitivamente, no será hoy. Mi brasier es negro y panti blanco. Nunca he querido combinar mi ropa interior, pero ahora deseo ser más selectiva. Me visto, empiezo a mirarme en el espejo ubicado detrás de la puerta. Me desenredo el cabello, me
para que estés informado. En la noche, después de las
crema y unas "Vans" negras. Se ve tan surfer con su pelo cayendo por su frente, lleva puesta una gorra de lado negra y camina hacia mí. Nos fundimos en un abrazo, al separarnos alza mi mentón y nos besamos.
rró con su sonrisa d
ha convertido e
ira mi vestimenta y ag
sobresaltada y
adernos y Ken
a? -sostuvo mi ma
cuadernos -lo empujé
parte de atrás y paso por entre medio de los asientos. Listo, me vuelvo con ellos, los echo en el
nes piedras? -Lo alza en e
rsenal. Además, yo puedo lleva
te cargué a ti también -alargó el b
mis nervios me traicionan y muerdo el lado inferior, ese que tanto le da atención. Mi respiración acelerada por la corredera, me besa y al soltarme me tomó de sorpresa. Me trepa guindando de nuevo, me quedo tranquila y no peleo. Ya me estoy
adicto a tus labios, mmm... -su lengua recorrió s
confiado. Me arreglo el cabello, Ken me tira una guiñada subiendo al jeep y sient
acosador como los periodistas. Por cierto, ¿qué hiciste para que no est
los paquetes de comi
me eches la culpa, si me comporto como un
camente puse la
e haces adicto a ti, nena -un suav
onrisa es mi perdición-. No estando conforme me entr
La culpable sigues siendo tú -el descarado levantó una ceja y volvió a apuntarme-, respondes mis llamadas y el problema es que no puedo evitar escuchar tu voz -iba a replicar, pero su mano tapó mi boca-. Shh, por eso te llamo porque necesito oír tu voz,
on sus ojos caramelos con motas de verde. No importa si es acosador o no, su visita fue maravillosa. Debo
etalle que jamá
cielo se ve hermoso, todo claro, con la presencia del sol brilla
l no ser un chico madrugador, no molest
Manolo, pero un desayu
eguntó Ken-. Tengo co
reír por la
re abuelo, desayuno en su panadería -hablar del viejo me apasio
petencia. Tengo un sitio especial para que d
ber? -dije cu
ciencia
empre camino y en el cual Ken dejó un bonito recuerdo. Desde ese día nuestra amistad empezó a renacer. En vez de pasar de l
-exclamé y me bajé
iezo a dar vueltas y me siento volar. Al abrir mis ojos contemplé el cielo y los árboles. La mirada
mo si él tuviera el poder de verme-. Tiara, eres una fuente bri
un paparazzi escondido y lo besé. Somos solo dos jóvenes enamorados, nada que ocultar. Él me endulza con cada palabra y es imposible no expresarse. Al separarnos juntamos nuestras narices, respiramos j
valiente-, me siento como uno ahora mismo -parloteé por
mejillas y sus ojos
Siempre deseé un mono, valió la pena
an mi cintura y no
en. -Lo empujé si
a mi monita. -Es u
-dije haci
l árbol y siento sus pasos detrás. Al llegar, volví y lo ayudé con
en las nubes y no respondí sorprendida-. No puedes comer s
información s
calizar y me dio el envas
e no te gusta que estén encima de ti, pero tenía que saber e informarme
í, todos los días teng
odó? -Se v
molesta. Él no entiende que fue algo tan especial para m
grandaron-. Es un momento para congelar y atesora
to. Comemos huevos revueltos, hash brown, bacon y café. Fue bonito este momento al aire libre. Nos
o, Kendrick -fingí aflicción-. Perdona, si
isa, me acaricia el
de champú para el chico del re
beza, mi Ken es
prisa. ¿Te suena casa de papá una cena? -pongo los
ena -es un perro en una investigación-. Al meno
ra endemoniada. Me tensé, mis nervios están presentes y Ken buscó el moti
dos, vete ya -m
có mi barbilla y me hizo mirar sus ojos-. Respira y exhala -sus palabras
Cierro mis ojos, suelto el aire y respiro. Al abrir
í -acarició mis mejillas-. N
o mi fuerza. El amor es mi cura, tal vez tam
rick -dije mej
ntraré y te irás conmigo -dijo con su v
servan y entré al negocio. Mi hermano me
udé ignorando la te
fuerte del brazo. Me volteé asustada con el corazón desbocado y en el rostro de Rodrigo solo hay despre
e pedí con la voz agitada-. Me lastimas -le info
toda voz-. ¡Te largas de mi negocio, m
embargo, Ken se agachó, lo esquivó y golpeó en el estómago de mi hermano. Rodrigo se dobló y Ken se volteó buscándome. Veo a mi hermano lanzarse como
nse ambos! ¡Ayuda!
me suelta. Veo borroso por las lágrimas, en eso entra Raúl y otro hombre
en rabia la salida-. ¡No te quiero ver, no vuelvas! -su rostro amoratado y sus
o. La mirada de todos pendiente a mis pasos y me aproximé hacia mi herm
os brazos del hombre-. ¡Solo quiero ir con mi n
dé a unos pasos de Rodrigo, mi corazón se e
etón de mano y solté una risa irónica-. ¡Tú eres el hijo pródigo! -expresé subiendo el tono cada vez más y lo señalé-. ¡Estoy harta de soport
o alcé mi voz me acerqué a mi libertad. No callé y menos agaché la mirada. Por primera vez estoy sintiendo el borde de la libertad, a
cuánto duras si
ronto está golpeando el ojo de Rodrigo. Mi hermano cae al suelo,
y pasé la mano por mi cabello-. ¡Imbécil de mierda, te tr
ular y llamó a alguien. Mis manos tiemblan, Ken camina molesto al frente del jeep y tras diez minutos subió. Me limpio las malditas lágrimas y él no busca mis ojos. Eso me asusta, quiero saber que sigue a mi lado y no recluido en su mundo. En un absoluto silencio arrancó el jeep y vamos tensos. Veo que le baja sangre por su labio, b
Mi padre está arreglando todo
Al apartarnos ve la duda en mis ojos, vuelvo
nto y mis ojos pueden salir rodando por el auto si pudieran-. No me extraña que fuera planeado
té. Nunca los ví, estaba tan cegada por la rabia y no vi a mi alrededor. No soy buena
un hilo de voz-. Es mi culpa -
arían en la lavandería? Esto hu
me duela-. Juntos siempre, grábatelo -su dedo índice dio leves golpes en mi sien-. Tu hermano te lastimó, físicamente y verbalmente -nunca imaginé que Rodri
na un carro detrás y Ken golpea el volante. Baja e
an su tensión-. Vamos a casa y ahí hablamos -encendió el auto y antes de part
a. Al llegar a su casa pasamos varios carros, entramos por la primera entrada y al estacionarnos veo a Fabi. Está de brazos cruzados en frente de su carro. Mi
pes -bajé la mirada a mi braz
me había dado cuenta en medio de los insultos. Sin embargo, esas marcas se ir
pero está lejos de estar relajado y el que lo conoce sabe la lucha que e
Ken que se pasa las manos por su
e cólera-, estaría golpeando su maldita cara y le recordaría que se lave la boca ant
Es alto, cabello negro, ojos oscuros y sus rasgos toscos. El señor viene serio, muevo el pes
dio un escrutinio y terminó enfocánd
jé guiar por mi primo. Al entrar al recibidor me quedé boquiabierta, es precioso con lujos por toda la casa
rostro, Kendrick -comen
r, así o peor está el
na y puedo captar el motivo. Empiezan a salir imágenes de Ken golpeando a mi hermano, me muestran llorando y mi vergüenza va en aumento. Me tensé, ahora todo el mundo conoce mi vida de mierda y lo débil que soy. Seré la nueva amiga de Ken insufrible, mi primo me suelta y va hacia el mu
estado alerta. Preparado para actuar, pero desde que conociste a la chica, todo es un misterio -me señala aturdido y soy pequeña en
No puedo permitir que su relación se quiebre. Además, estoy cansada de ser transparente. Nunca volve
guí la atención de los presentes-. No sabes cuánto
tan con los míos. «¡Dios, como amo esos ojos!», exclamé en mis pensamientos. Amo todo de él y debo apartarme por su bien. Él niega con su cabeza, entre
tiene mi corazón -mis ojos se llenan de humedad y no puedo expresar lo que causan sus palabras-. Por ella volvería a golpear a ese cerdo. Él la lastim
rdos. Me acaricia la mano, siento que todos miran mi reacc
lpe la cabeza y al mirar a su padre está sonriente-. ¡Bie
su familia tan pronto y menos este caótico día. Seré franca, no imaginé una bienvenida en ningún momento de mi vi
e su casa? -La pregunta es
so a mirar a cada uno. La foto de la casa de playa me ayudó a conocer a sus padres. Los chicos aún sonríen y ella va directo hacia su hijo. Puedo ver su amor por é
gustiada y su dedo rozó la herida-
o que se preocupan por su hijo me llena el
edados por ella y me tomó por sorpresa levantando la mano, hundí los hombros. Lo primero que pasó por mi mente fue un golpe, pero su mano acarició mi mejilla y si se dio cuenta de mi miedo lo ignoró. Su mirada dulce
e quedan cortas con tu bel
ara, mamá -mi Ken alargó s
n hacerlo con su aprobación-. Seremos amigas, y
, usted es hermos
a al alma y hace que pueda
-habló el papá y me soltó buscando a su espo
eth negó vehemente-. Esta es tu
s su recibimiento y saber que no
n la prensa? -Ken volv
ucionen como mejor puedan-. Ya hablé con el Sr. Andino, todo está bien -Ken soltó un suspiro y me d
eptó?! -No puedo
s pares de ojos, puede ser
un abogado -mi primo que tanto me co
jos y veo su rabia contenida. Pero
se en mi habitación y luego bajo a terminar de resol
padres están presentes. Debo hablar, abrí la boca para refuta
te asustes
Ken, tus padres... -Soy
s y nada está prohibido. -Nos dio pe
toy pasmada y Ken me ag
y puños en su espalda intenté que me so
y lancé una en su cara. Ken la atrapó y me golpeó con ella. No puedo quedarme golpeada y agarré otra. Estamos en guerra de almohada, nuestras risas mezcladas y en eso se tira encima de mí. Me agarra el rostro, me besa suave y su sabor es metálico por su labio herido. Kendrick hace que olvide los enojos y problemas. El beso subió de tono, nos encendemos como chispas. Las lenguas danzando y de un j
ero si tú... -habló en
ro vivir -dije sin miedo y
a y nos perdemos el uno con el otro. Somos