sta de Ánge
el shock y la indignación. El leve color que había regresado a las mejillas de Byron se dren
a cuidadosamente construida finalmente desmor
rme-, que tengo una defini
igiéndome hacia el salón de damas. Lo último que necesitaba era que me vieran discutiendo c
ro al entrar, el zumbido tranquilo de la gala fue abruptamente atravesado por
te de un tono azul alarmante. Sus ojos estaban muy abiertos por el terror, luchando por llevar ai
do! -escuché gri
arios. ¿Alergia? ¿Peligro de asfixia? Mientras daba un paso hacia e
n una histeria fabricada. Me había seguido al salón. Sus manos em
olor agudo y punzante atravesó mi pierna, pero apenas lo registré. Mis ojos esta
re mí, con el rostro contorsionado por l
enenarlo! ¡Siempre ha estado ce
s e infundadas, llenaron
i mirada aterrizó en el niño de nuevo, realmente lo miré. Su rostro no solo estaba azul por falta de oxígeno; estaba moteado con roncha
Reacción alé
os se movieron de un lado a otro, buscando la fuente de la reacción. Junto al niño, una galleta de mant
. Grave. Cada s
e, ignorando el la
cesita un EpiPen, ahora! -grité, mi voz co
do de mí hacia arriba. El rostro de Byron, oscuro de furia, estaba a centímetros de
gar a mí? ¿Para manipularme? ¡Estás aún más loca de lo que recuerdo! -Su agarre se apretó, exprimiendo la
zando teatralmente, se
a odiado! ¡Quiere que suframos,
ron las llamas de
n abierta sospecha, incluso asco. Sus susurros comenzaron: "¿Realmente el
un rasbido débil y desesperado. Las ronchas se extendían rápidamente, sus párpados s
do en mi rodilla, se desvanecieron en la insig
palabras explotando de mí con un
ano libre, mi palma conectando con el lado de la cara de
tos con incredulidad atónita. Nunca había sido golpeado por mí, por nadie
ncia-. ¡Tu hijo se está muriendo! ¡Está teniendo una re
s renovados lamentos de Christin. Caí de rodillas junto al niño, mis dedos
en sobremarcha. Su piel estaba fría y húmeda. Su
ara mí misma, viendo la gal
vaba, un hábito de años trabajando en laboratorios de investigación y hospi
o familiar. Un EpiPen. Lo saqué, su tapa naranja bri
dolor en mi rodilla y el latido en mi mejilla donde Christin me había ab

GOOGLE PLAY