peles del divorcio bien agarrados en la mano,
su auto, su celular se iluminó con el
alizada, pero luego se llevó el c
ría voz de Alexander. "¿No d
acilar, casi como si hubiera un atis
spondió en voz baja: "
ander intervino: "Compra una pomada
orcio que tenía en la mano, sintió una profunda preocupación. "¿Te lastimaste?
ravés del auricular le provocó un escalofrío: "Al
eta que salía del auricul
el amor de la infa
uede que haya lastimado a Suzanne... No es algo de lo que tú puedas ocuparte... Solo
s de que Florrie pudie
tono de marcación seguía sonando, el entumecim
mprara la píldora del día después pa
ella no era más que una sombra lamentable, aferrada a él con ciega devo
felicidad permaneciera intacta y el corazón de Alexis W
abrió, lo que vio fue a Suzanne acurrucada en los brazos de Alexander, con un delgado camisón desli
re los labios con aire juguetón. "¿Sigues enojada conmigo, cariño?", preguntó, "Me portaré bi
hero y dijo, con voz dulce y juvenil: "M
esidía su verdadero afecto. Entre ellos dos había int
bolsa que llevaba. Cuando Suzanne finalmente s
expresión de falsa inocencia, y dijo con
ara levantarse del regazo de Alex
atrayéndola hacia sí con firmeza. "No malgastes t
palabras eran cortantes como el hielo. "Deja la bolsa sob
sa no deseada, tratada como una m
que intentaba ocultar, y ella misma esbozó una leve sonrisa. "Ten cuidado, Alexander
or la irritación, y espetó con vo
él dijera pod
der en sí, sino por el corazón q
erzos se centraron solo en proteg
do con él por su riqueza y su estatus, por lo q
de Suzanne del extranjero. Con su vuelta, todo se derrumb
mejor era apartarse y concederle