lujo se convirtió en el grito ahogado d
, sus ojos, antes brillantes,
ndrea Torres, la nueva pareja de mi esposo y la mu
de respirar!", imploré,
padre de Camila, no vio a su
ó, su rostro marcado por un
ía en mi alma, me arrastró por el cabello y hun
ras la gente observaba, algunos
ueña, y Ricardo me lanzó su última advertencia: "Si le pasa al
cama de Camila, mientras Ricardo y Andrea exhibían su "amor" en redes social
alma fría que no sabía que poseí
e siseó: "Eres una muerta de hambre que mi hijo recogió de la
ueño departamento prestado,
n mi casa, formando su "familia", con Andrea etiquetándome para
su vocecita inocente: "
golpeó: Ricardo nunca nos había amado, s
na de sus órdenes, asisti
na trampa, un sacrificio para liberar a Andrea de un ma
a, exigiendo que la leyera en voz alta,
mido el vómito y había sid
n una sonrisa se
o, lo hice firmar un documento sin leer, y
. Dejé a mi hija en su auto alqui
Camila, "a un lugar donde nadie pueda vol
había terminado. Y yo, por