tación, contando las horas para mi partida. La man
atrick tocó
mirarme a los ojos. "
nzada de esperanza. ¿Quizás quería
o más sencillo qu
al coche. Diane estaba sentada en el asien
ando falsa dulzura. "Patrick y yo vamos a San Ángel. Necesit
otros. Yo era la acompañante, la tercera en discor
zo de Patrick. Hablaban de su luna de miel en Europa, de las fiestas a las que a
en sus labios. Era la misma mirada que una vez me dio a mí. Verla dirigida a otra persona fue un
ventana, apretando las uñas en las pa
e colores y olores. Pero para mí, todo era gris. D
le dijo a Patrick, señalando una
me miró de arriba abajo. Mi vestido
"Ayuda a tu señora a empacar
la cara. Me quedé hela
vuelta. Me miró,
, pero su voz era débil, sin con
bre borracho me insultó. "Leo" se había puesto delante de mí, sus ojos furiosos
e había ido
llevó a Xochimilco. Que
dijo mientras nos subíamo
. Un espectáculo de fuegos artificiales explotó sobre nosot
olo
una manta. "Algún día," me había dicho Leo, "te llevar
, pero para otra. Yo era solo una es
lpaba para ver mejor. Nuestro bote se m
l aire. Y luego, el agu
é, tragando agua, mis pulmones ardiendo. V
gua sin dudarlo. Por un segundo, u
no nadó
e. La alcanzó, la rodeó con sus brazo
vez miró h
del agua llenando mis oídos. Mi última visión
yo ya n