as, y el vestido rojo que a Ricardo t
ndo con una noche diferente, pero él llegó tarde,
speranza se desvanecía y la puerta de su estudio se cerra
en burla: "Si tienes tantas necesidades, ¿po
llación se transformó en horrores al ve
el de la amabilidad fraternal, estaba en sus brazos,
rar en su teléfono cientos de mensaj
preparó otra de sus cenitas r
el dinero de su familia. Es una
a manipulación calculada. La Sofía in
uerdo lejano, la matriarca tequilera de J
Lo sé todo. Es hora de que vuelvas a casa. Tu imperio t
ínica de fertilidad; la familia Valdivia neces
stete o te vestiré
violada, paralizada por el shock y el dol
fertilizados, "ocho futuros Valdiv
el suelo: "He destruido la evidencia de su crimen. Díganle a Ricardo
de mi abuela no fue solo un grito de auxilio, sin