tad de hierro que sorprendió a los médicos. Lo primero que hizo al poder ponerse de pie fue pedir ver
espertaste", dijo con la voz qu
zo. Se apartó con una friald
voz firme, sin rastro de la debilidad que se espe
mi princesa
l General Ric
i le hubieran dado una bofetada. Parpade
hombre? Es un bruto, un militar rudo, con fama de ser despiadado. La gente le
eputación en la vida civil era intimidante. Era el jefe de seguridad de Don Fernando desde hacía una década, un hombre de lealta
acero. "Necesito un arma. Necesito a alguien que Alejandro y sus cómplices no puedan tocar, que no puedan comprar
Le contó lo que había escuchado, la traición de Alejandro y Laura, el plan para robarle su empresa. Le explicó que,
on él, le daré el estatus y la conexión con la familia Ramos que lo hará intocable. A ca
su hija. La joven ingenua y soñadora había desaparecido. En
probando los límites de su resolución. "¿Un hijo
ioso", respondió Sofía sin dudar. "Y si no tengo hijos, no importa. Mi prioridad ahora es limpiar la c
eza en su mirada. Vio la verdad en sus palabras, el dolor que la había forjado en
ieres, eso tendrás. Prepararé el anuncio oficial. El matrimonio entre S
s círculos sociales y empresariales de México. Nadie podía entende
uerdo la asaltó. Recordó una tarde, años atrás, en su oficina. Alejandro hab
e que conozco", le había dicho, bes
onde le había dicho que Alejandro necesitaba cerrar un trato con un viejo industrial que era un fanático de la ópera. El gesto no había sido por ella. Había
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