i casa se transformó e
en línea, mirando catálogos de yates. Mi madre compraba compulsivamente ropa de diseñador con tarjetas de
una de las familias más ricas del país. "¡Se morirán de la
rfeccionaba su papel con u
practicando su sonrisa discreta en cada espejo. Hablaba c
ormó un día, como si estuviera compartiendo un secreto de estado. "Y
, repetí yo,
a observaban
ó mi padre. "¡Ni su prop
i amor!", la alababa mi m
bablemente tenía cámaras ocultas en cada rincón. Pensar que podían engañarlo con una imitación superficial era el colmo de la estupidez. Él no se había enamor
ieron que era el
ncontrado a una mujer desorientada en la carretera. Dirían que parecía haber sufrido un accidente, q
propia "genialidad". "Nos presentaremos como buenos samarita
staba calcula
una de López a través de Daniela... ¡Seremos más ricos q
ahorrado, un disco duro con mis proyectos personales. Mi plan era simple: una vez que hicieran la llamada y la atención se centrara en ellos, yo de
principal. La adrenalina bombeaba en mis ve
pomo de la puerta, una figur
mi p
as, Sofía?", su voz e
ron detrás de él, bloqueand
s. "Eres parte de esto. Necesitamos que confirmes la historia.
stedes", dije, mi voz
ro de Elena López torcido
a sepa quién tiene la tecnología para crear una réplica humana
i habitación y cerraron la p
tima esperanza muriendo. Estaba prisionera de su locu