los, a cambio de su devoción, vieron en ella una inversión, una pieza que podría encajar en su linaje, y la apoyaron para que estudiara danz
a sinónimo de pasión y perfección. El Ballet Folclórico Nacional, una joya cultural propiedad de la familia de la Cruz, no dudó en contratarla.
bajo incansable llevaron al Ballet Folclórico Nacional a la cima, convirtiéndolo en un referente internacional. Tres a
Sofía, radiante en un vestido elegante, subió al escenario. Tomó el micrófono, su corazón latiendo con una mezcla de o
a sobre su vientre ligeramente abultado, caminaba Valentina, una mujer con una sonri
n el escenario, el micr
ario, su rostro una máscara de despre
ncio sepulcral. "¿Crees que mereces ser la di
fía se transformó
tina. "¡Si no puedes d
ndeja cercana, se acercó al borde del escenario y le arrojó el líquido a
había luchado, se deshacía frente a sus ojos. En un acto de desesperaci
o, por
ario y la pisoteó, su zapato de piel car
a familia de la Cruz!", escupió las palabras. "¡No creo
labios de Sofía. Levantó la vista, el
ará saber que
herencia, estaba al borde de la quiebra. No sabían que solo el proyecto que ella hab
de hablar, las burlas es
que Sofía podía oler su perfume rancio. "El Ballet Folclórico Nacional es lo que es gracias a los
unió al coro
s y quiere triunfar en el mund
, atendiendo al marido y a los sueg
njero, las mejores compañías del mundo le habían hecho ofertas. Lo dejó todo por la familia de la Cruz, no solo para
clórico Nacional", dijo con una calma que sorprendi
én te crees que eres? ¿Cuándo te h
n un aliado. Desesperada, buscó con la mirada a
tedes conoce
padre de Ricardo se acercó y le dio una palma
os, Sofía. Nadie aq
ñicos cuando los padres de Ricardo desviaron la mirada hacia Valentina y su vien
ardo con frialdad, mirando a Valent
ple transacción. Durante años, se había desvivido, convirtiendo una compañía local en un gigante en solo tres años. Se había esfo
en el extranjero por mi talento?", preg
mpaciencia, "pero lo más importante es la capacidad
ino abajo. Un sabor me
co Nacional se multiplicaron por cinco, ¿y eso n
re con tus diseños y tus locuras. ¿Qué mujer decente e
secretaria del Ballet puede hacer tu trabajo
ctoriosa, se acercó a Sof
na mujer es lo que decide s
pared. Con un movimiento brusco, le arrancó el collar de perlas que le había regalado el día de s
árgate! ¡La familia de
ironía. Las lágrimas le quemaban los ojos, pero se
derecho a
ó, sorprendida