sonrisa forzada en su rostro. Sofía lo observó, cada gesto,
un problema urgente que debo resolver
o teléfono, el que tenía la pantalla rota, vibró sobre la mesa. Era otr
ero cada palabra era un
? Es tu querida he
hermanastra que apenas conocía, una presencia fantasmal en su vida marcada por el resentimiento y la historia de una traición familiar. La infidelidad de Alej
ndro, que la observaba con una
ves pálida," dijo él, in
oy bien, solo un poco cansada. La boda,
r su excusa. "Mira, lamento tener que hacer esto, pero de verdad debo
logró reprimir. Él no iba a la oficina, iba a verla a ella, a Camila.
a, forzando una sonrisa. "Pediré
ue. En el momento en que la puerta se cerró, las piernas de Sofía cedieron y se derr
y Camila estaban en la parte trasera de un bar, besándose, tocándose con una familiaridad que hablaba de una larga historia. Luego, el remitente anónimo envió una
s propios ojos. Recordó que uno de los mejores amigos de Alejandro, Ricardo, era un adicto a las rede
"La Escondida" , y en el fondo, desenfocado pero reconocible, estaba Alejandro, habland
salió del apartamento. No se molestó en cambiarse, conducía con e
ombras. La fachada de "La Escondida" era discreta, con gra
Él le susurraba algo al oído y ella reía, echando la cabeza hacia atrás de una manera que Sofía había visto miles de veces, pero dirigida a ella. Verlos juntos, t
ad, mientras la escena se desarrollaba ante sus ojos. El dolor era t
como un escudo. Él era la estrella del campus, carismático, popular, rodeado de gente. Un día, un grupo de estudiantes se estaba burlando de sus fotos, llamándolas pretenciosas. Ella solo quería
n una sonrisa suave. "Son increí
Qué frágil. Ahora, mirando a ese mismo hombre acariciar a su hermanastra, se dio cuenta de que la chica frágil que
o. Sus dedos se movieron con precisión mi
estoy esperando con tu
o, leer el mensaje y sonreírle a Camila antes de
ginas las ganas que tengo de llegar
e dio la vuelta y se alejó en la oscuridad, dejando atrás la escena de su vida destroz