spital General, hablando de un accidente, una motocicleta y de mi hijo, Juanito, el
Recordé la estúpida fiesta que Sofía había organizado para su primo Ricardo, un m
ro, como una reina de hielo, estaba Sofía, riendo con Ricardo en un vestido rojo que nunca le vi. Cuando le dije que Juan
ufrimiento era el mío. Regresé a casa y encontré sobre la cama un costoso traje de mariachi para Ricardo, comprado con el mismo dinero que Juanito, en su moto vieja,
odió por estropear su noche, y yo no entendía cómo podía haber vivido tanto tiempo con una extraña. Pero la c